Bibliotecas. Vol 42, N°1, enero - junio, 2024. EISSN: 1659-3286
URL: http://www.revistas.una.ac.cr/index.php/bibliotecas/index
DOI: https://doi.org/10.15359/rb.42-1.5
Licencia: Creative Commons (BY-NC-ND) 4.0 Internacional
Recibido: 05 de setiembre de 2023
Aceptado: 03 de octubre de 2023
Publicado: 31 de mayo de 2024
Investigadora y consultora independiente en el área de la Bibliotecología y Ciencias de la Información con énfasis en TIC; Estudiante de la Maestría en Gerencia de Tecnología de la Información en el Instituto Tecnológico de Costa Rica
Las motivaciones son el entramado que impulsa las acciones de las personas y, según lo han señalado diversas investigaciones, en ellas descansa el éxito de muchas de las labores que influyen al momento de actuar y elegir aquello que se desea alcanzar. El presente escrito indaga en las motivaciones que tienen los académicos activos de la Universidad Nacional (Costa Rica) para publicar sus hallazgos de investigación financiados con fondos públicos, lo cual se efectúa desde un enfoque metodológico mixto, una investigación descriptiva y exploratoria, y parte de cuestionarios, entrevistas y análisis de contenido como técnicas de recolección de datos. Al finalizar la investigación, se concluyó que las motivaciones de los académicos son tanto positivas como negativas, se determinó que existen criterios atractivos académicamente para estos investigadores, pero, al mismo tiempo, están presentes criterios que pueden estar vinculados a concepciones inherentemente desalentadoras. Investigar las motivaciones desde la bibliotecología posibilita identificar cómo estas tendencias influyen en la democratización de la información. Además de comprender cómo los investigadores se sienten motivados por el disfrute y la curiosidad intelectual dependiendo de la revista en que publiquen; esto ayuda a distinguir entre las motivaciones intrínsecas, fundamentales para el compromiso y la calidad del trabajo, y las extrínsecas, como recompensas o reconocimiento externo.
Motivaciones; Publicaciones periódicas; Personal académico; Democratización; Acceso abierto; Ciencia abierta; Universidad Nacional, Costa Rica.
Motivations are the framework that drives people’s actions, and according to several research studies, they are the basis for the success of many of the tasks that influence the moment of acting and choosing what one wishes to achieve. This paper investigates the motivations of active academics at the National University (Costa Rica) to publish their research findings financed with public funds. Based on, a mixed methodological approach, and a descriptive and exploratory research, and uses questionnaires, interviews, and content analysis as data collection techniques. At the end of the research, it was concluded that the motivations of academics are both positive and negative, it was determined that there are academically attractive criteria for these researchers, but at the same time, there are criteria that may be linked to inherently discouraging conceptions. Investigating motivations from the perspective of librarianship makes it possible to identify how these trends can influence the democratization of information. In addition to understanding how researchers are motivated by enjoyment and intellectual curiosity depending on the journal in which they publish, this helps to distinguish between intrinsic motivations, fundamental to the commitment and quality of the work, and extrinsic motivations, such as rewards or external recognition.
Motivations; Periodical publications; Academic staff; Democratization; Open access; Open science; Universidad Nacional; Costa Rica
En una sociedad cada vez más conectada, es una necesidad garantizar el acceso a la información; en términos de derechos humanos, esto debería convertirse en una práctica extendida entre todas las comunidades del globo. Las personas requieren, cada vez más, tal acceso como un esfuerzo para asegurarse un óptimo desarrollo social, cultural, político y económico, de acuerdo con lo señalado por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación la Ciencia y la Cultura (UNESCO) sobre la ciencia abierta, que “comprende todas las disciplinas científicas y todos los aspectos de las prácticas académicas” (2021, p. 7), y lo referido en 2011 por la Federación Internacional de Asociaciones de Bibliotecarios y Bibliotecas (IFLA), acerca de que el acceso al conocimiento mejora la calidad de vida de las personas y apoya el óptimo desarrollo sostenible de la sociedad.
Para 2013, la comunicación científica tradicional estaba en manos de unas pocas editoriales comerciales que controlaron más del 52 % de las revistas académicas, situación que les permitió cobrar suscripciones excesivas para acceder a los artículos y al contenido científico; por consiguiente, se limitó la posibilidad de democratizar el conocimiento y de libre acceso a todas las comunidades (Resnick y Belluz, 2019). Como respuesta, desde los años noventa, los académicos han venido impulsando el Open Access Movement o movimiento de acceso abierto (AA) para fomentar y arraigar prácticas que posibiliten la distribución y el uso de las publicaciones científicas a toda la comunidad.
Según Alfaro Alfaro (2022)(2022), citando el estudio de Nielsen y Azofeifa (2013), en Costa Rica, la investigación científica se genera, principalmente, desde el seno de las instituciones públicas de educación superior: Universidad de Costa Rica (UCR), Universidad Nacional (UNA), Tecnológico de Costa Rica (TEC), Universidad Técnica Nacional (UTN) y la Universidad Estatal a Distancia (UNED). Por tal razón, es medular tener a la vista la filosofía de AA como una alternativa para democratizar la información que se produce, no solo entre su comunidad académica, sino también en el resto de la sociedad civil.
En ese sentido, el presente escrito es un subproducto de la investigación presentada en junio de 2022 para obtener el grado de Licenciatura en Bibliotecología y Gestión de la Información por la Universidad Nacional (Costa Rica), la cual tuvo como objetivo principal diagnosticar la situación del acceso abierto con la que cuentan los académicos de la institución activos desde su ingreso y hasta 2019, así como la distribución de los artículos resultado de sus investigaciones financiadas por esta universidad para proponer lineamientos de acceso abierto que puedan regular y normalizar los artículos financiados por la UNA, considerando las motivaciones de las personas académicas que ahí laboran. De modo que, en este artículo se indaga en las prácticas de publicación de los académicos para identificar cuáles son aquellos estados internos o externos que activan, dirigen y sostienen la conducta de publicación, así como las motivaciones y editoriales donde el personal docente de la Universidad Nacional (Costa Rica) decide publicar sus artículos, producto de las investigaciones financiadas con fondos públicos.
Desde 2014, la UNA cuenta con la política de Conservación del patrimonio académico institucional, cuyo propósito ha sido “establecer y promover la conservación, publicación y difusión del patrimonio académico, garantizando un equilibrio entre el respeto a la propiedad intelectual del autor, la Universidad Nacional y el libre acceso a la información y el conocimiento” (pp.1-2). Sin embargo, en la investigación se encontró que la política presenta, como se conoce en derecho, “vacíos legales”: su proceder es poco en cuanto a vías de publicación claro, así como en las formas de depósito, el financiamiento e incluso prácticas de coautoría aceptables, por mencionar solo algunas. Se vislumbra que esto se debe a dos razones: la primera, a la inexistencia de una política institucional bajo la filosofía del acceso abierto, y la segunda, se requieren mejoras conceptuales en las políticas institucionales existentes; conjetura a la que se llega no solo por el análisis de contenido realizado a las diferentes normativas existentes, sino porque estas ambigüedades conceptuales también son demandadas por los académicos.
En este artículo se pretende conocer, a partir del análisis de sus motivaciones, las prácticas de publicación de las personas académicas de la UNA activas hasta 2019 y que hayan hecho al menos una publicación. Se revisan exhaustivamente los planteamientos de la tesis Propuesta de lineamientos amparados en la filosofía del acceso abierto para la regularización y normalización de la distribución de las publicaciones realizadas en la Universidad Nacional, Costa Rica(2022), pero además, se consideran otras investigaciones y debates en esta materia. Para reflexionar, finalmente, sobre las motivaciones que llevan a las personas investigadoras a publicar en determinada revista o editorial e indagar en las llamadas buenas prácticas de publicación en acceso abierto.
El acceso abierto, hoy, es más que una iniciativa que permite el acceso a contenido de gran valor científico y académico revisado por pares sin necesidad —en la mayoría de los casos— de pago por suscripción o registro por parte de los autores y lectores. Para la UNESCO, este se inscribe en el “acceso gratuito a la información” (2013, p. 8) y añade que “los autores entregan el derecho a copiar, usar, distribuir, transmitir y hacer trabajos derivados para cualquier actividad legal” (2013, p.8). Para importantes referentes del AA, como Peter Suber (2012), el acceso a la información debería ser digital, tener acceso en línea gratuito y estar libre de la mayoría de las restricciones de derechos de autor y licencias. Suber, además, señala que el AA “es compatible con los derechos de autor, la revisión por pares, […], la preservación, el prestigio, el progreso en la carrera” (2006, p. 17), entre otras características asociadas a la comunicación científica.
De tal modo, permite un horizonte de nuevas formas de comunicación, colectivización y diseminación de la ciencia. Producto de una serie de esfuerzos del Open Access Movement, Open Society Foundations, grupos académicos y activistas, se ha pronunciado una serie de declaraciones sobre el acceso abierto, entre las más citadas están la Declaración de Budapest (2002), Berlín y Bethesda en 2003, así como la declaración de Salvador, Bahía (Brasil), de 2005. Las tres primeras sentaron el precedente de las dos vías de publicación ampliamente más conocidas: la vía dorada, esta propone la publicación de artículos en revistas en las que el lector tenga acceso gratuito al contenido completo, y la vía verde, que concibe el autoarchivo de los artículos en repositorios de acceso abierto a través de los preprints o con el postprint de su publicación en una revista de acceso restringido o pago.
La declaración de Salvador (2005), Bahía, insta a los gobiernos a hacer del acceso abierto una prioridad en las políticas de desarrollo científico. Además, propone exigir que la investigación financiada con fondos públicos esté disponible en forma abierta; así como fortalecer las revistas locales de AA y los repositorios institucionales para promover la integración del desarrollo científico y académico y, de esta manera, contribuir al acervo mundial del conocimiento. Así las cosas, según señalan Bongiovani et al.:
el éxito del movimiento AA dependerá, en gran medida, del grado de adopción de las prácticas de publicación en abierto y/o de auto-archivo en repositorios por parte de los investigadores, principales actores en el proceso de comunicación de la ciencia, así como de los acuerdos entre editores, instituciones que financian la investigación. (2012, p. 454)
Dependerá, también, de todas las partes involucradas en el proceso de la comunicación científica; por ello, se vuelve indispensable conocer las motivaciones de las personas académicas para identificar las tendencias y posibilidades en este sistema de comunicación actual. Asimismo, se vuelve crucial indagar en las motivaciones de las personas académicas desde la bibliotecología, debido al papel que los profesionales de la información desempeñan en su gestión y acceso. Investigar en las motivaciones al elegir una revista para publicar sus hallazgos de investigación puede ayudar a determinar cómo mejorar el acceso a la información científica y académica en la sociedad y, de esta forma, contribuir a la democratización del conocimiento al procurar que esté disponible para la comunidad científica y el público en general.
Las motivaciones, en palabras de Rafael Bisquerra Alzina, son un “constructo teórico-hipotético que designa un proceso complejo que causa la conducta” (citado por Naranjo Pereira, 2009, p. 154). Según Bisquerra Alzina, esto se debe a que intervienen diversas variables, tanto biológicas como adquiridas, que influyen en la “activación, direccionalidad, intensidad y coordinación del comportamiento”, el cual está encaminado a lograr determinadas metas (citado por Naranjo Pereira, 2009, p. 154). Las motivaciones originan una acción, entendida como activación, en cada persona para que cumpla un objetivo; por lo tanto, tiene una dirección hacia la que debe llegar con esfuerzo y constancia o, en palabras de Bisquerra, intensidad y coordinación.
Existen diferentes perspectivas teóricas que intentan comprender las motivaciones, para efectos de este escrito, interesan las propuestas de Richard M. Ryan y Edward L. Deci, así como las de Lyman Porter y Edward Lawler. Ryan y Deci son una pieza clave en esta investigación para entender la autodeterminación, con su teoría homónima, y su enfoque en la motivación intrínseca contribuye a comprender las motivaciones subyacentes de las personas académicas al elegir la revista en la que desean publicar.
La teoría de la autodeterminación se centra en la importancia de la motivación intrínseca, aquella que proviene de la satisfacción interna y el interés personal en una actividad, y sugiere que ambas están estrechamente vinculadas entre sí. Al mismo tiempo, destacan la importancia de la autonomía y la autodirección en la motivación intrínseca (Naranjo Pereira, 2009). Según esta teoría, la motivación intrínseca y el bienestar están estrechamente relacionados con la satisfacción de tres necesidades psicológicas básicas: la autonomía, como la sensación de tener elección y control sobre las propias acciones; la competencia implica sentirse capaz y efectivo en el logro de metas, y la relación como la necesidad de conexión social y de pertenecer a un grupo (Ryan y Deci, 2000).
Por su parte, Lyman Porter y Edward Lawler son conocidos, entre otras razones, por la teoría de la motivación y las teorías del comportamiento organizacional; su enfoque en la motivación laboral ha sido influyente en el campo de la gestión y la psicología industrial. Las motivaciones son un factor fundamental en el comportamiento humano, que permite orientar las acciones y toma de decisiones hacia una elección racional; además, se relaciona con la satisfacción laboral y el compromiso, vinculados estos, con la percepción de equidad entre el esfuerzo empleado y las recompensas recibidas (Porter y Lawler, 1967).
Vale la pena detenerse en las consideraciones obtenidas al comparar ambos postulados. Para Ryan y Deci, la motivación surge de las necesidades psicológicas básicas (autonomía, competencia y relación), que es impulsada por la satisfacción interna y el interés personal en una actividad. Mientras que para Porter y Lawler, la motivación puede ser extrínseca, influenciada por recompensas externas como el reconocimiento económico o no, que se basa en la percepción de equidad entre el esfuerzo empleado y las recompensas recibidas. Aunado a esto, Ryan y Deci enfatizan en la importancia de la autodeterminación y la autonomía en la motivación intrínseca; cuando las personas tienen el control y la autonomía sobre sus acciones, se sienten más motivadas y comprometidas con su labor. En contraste, Porter y Lawler no se centran específicamente en la autodeterminación, sino en la equidad percibida por el intercambio mencionado.
Al indagar en las motivaciones que tienen las personas académicas de la UNA, activas hasta 2019 y que tuvieran al menos una publicación, se debe partir de un enfoque cualitativo; a través de la aplicación de entrevistas a profundidad y cuestionarios aplicados, se indaga en las razones por las cuales estos académicos deciden publicar y en cuáles editoriales.
Es importante señalar que el perfil del informante incluye, además de ser un académico activo hasta 2019, que sus publicaciones deben cumplir con dos características indispensables: ser artículos, financiados parcial o totalmente con fondos públicos y estar publicados con la afiliación UNA, esta información se obtuvo de los datos contenidos en la Red Académica de Investigación llamada Red VIVO y el Repositorio Académico Institucional (RAI). Los datos recolectados de los cuestionarios se procesaron a través de matrices de análisis, mientras que las entrevistas a profundidad se trataron con la técnica de análisis de contenido mediante el software QDA Miner Lite. Se aplicó un total de siete entrevistas en las áreas de Filosofía y Letras, Ciencias Sociales, Ciencias de la Salud, Ciencias de la Tierra y el Mar, Ciencias de Exactas y Naturales, y Docencia y Extensión Artística.
La cifra de académicos que cumplieron con el perfil de informante establecido ascendió a los 583; sin embargo, la tasa de respuesta fue menor, 225 personas respondieron al cuestionario que se envió por medio del correo institucional. Este se conformó de doce preguntas cerradas, se partió de lo general con las siguientes consultas: a cuál área académica pertenecían y cuántos años tenía laborando como académicos en la institución hasta llegar a lo más específico, esto para conocer si cada vez que desarrollan una investigación como académicos de la UNA buscan publicar los resultados de estas investigaciones. También, se indagó sobre aquellas razones que les motivan a publicar por medio de una selección múltiple con una serie de siete opciones; en la última, la persona académica podía especificar otra motivación en caso de tenerla. Esto, triangulado con otra pregunta que les solicitaba identificar tales motivaciones con una escala de Likert del 1 al 5, en la que 1 era nada motivante y 5 totalmente motivante (véase el cuadro 1).
Asimismo, por medio de este cuestionario, se consultaron los criterios y aspectos motivantes que consideran primordiales para seleccionar una editorial o revista en la que desean publicar; por medio de la selección múltiple, los académicos podían seleccionar factores como la audiencia de la revista, su procedencia, el factor de impacto, la calidad de los artículos que se publican en ella, el área temática, entre otros. Posteriormente, se les consultó en cuáles revistas había publicado, por lo que se les solicitó mencionar algunas de ellas. Por otro lado, se indagó si a lo largo de su trayectoria como académicos de la UNA habían recibido algún tipo de apoyo económico o no económico para realizar determinada publicación.
Para abordar los criterios de internacionalización de las publicaciones, se les consultó si estas, por lo general, se publican en revistas nacionales, internacionales o en ambas; además, se preguntó si consideran que publicar estas investigaciones en formato de revista les posibilita tener mayor reconocimiento profesional a nivel nacional e internacional, así como que si publicar mejora su estatus en Carrera Académica. Por otra parte, para la investigación era fundamental conocer la percepción que los académicos tenían respecto al acceso abierto y lo que ello implica, razón por la cual se les consultó si consideraban que pueden publicar sus artículos en revistas de AA en su área de investigación, además de indagar si publicaron o han publicado sus artículos en revistas con esta filosofía.
Aunado a los cuestionarios, se realizaron siete entrevistas, una para cada una de las siguientes áreas: Facultad de Filosofía y Letras, Facultad Ciencias Sociales, Facultad Ciencias de la Salud, Facultad Ciencias de la Tierra y el Mar, Facultad Ciencias de Exactas y Naturales, Centro de Investigación y Docencia en Educación, y el Centro de Investigación, Docencia y Extensión Artística. Las entrevistas se desarrollaron conforme a una guía de preguntas semiestructurada, que posibilitó conocer a profundidad las motivaciones para publicar y elegir una revista, sobre su experiencia de publicación bajo la afiliación UNA y acerca de si ha tenido o no algún tipo de apoyo para publicar.
Además, acerca de su percepción y experiencia respecto a la publicación en acceso abierto, se preguntó su opinión sobre si el AA puede aumentar la visibilidad de las publicaciones que realiza. De la misma manera, se consultó si consideraba que el acceso abierto tenía algunas barreras que debía considerar antes de ser una alternativa para sus publicaciones para, finalmente, conversar con estos académicos sobre su percepción acerca de si la Universidad Nacional debería implementar algunos lineamientos que permitan regular un poco más las publicaciones de las investigaciones financiadas con fondos públicos.
Respecto de los resultados analizados, cuando se les consultó si cada vez que desarrolla una investigación como académico de la UNA buscaban publicar sus hallazgos de investigación, un total de 199 personas respondió de forma afirmativa, mientras que las 26 restantes aseguraron que no; al respecto, una persona académica del área de las Ciencias Exactas y Naturales afirmó en una de las entrevistas:
Cada vez, sí. Aunque […] la recarga que nosotros tenemos a nivel de académicos en la universidad es muchísima y a veces esas cosas nos quitan tiempo para poder publicar. Es un poco complejo y no siempre se puede hacer, pero yo siempre trato. (Entrevista 2, 2021)
Así como este académico, las otras personas entrevistadas concuerdan con que, a pesar de que la carga académica es alta, siempre buscan publicar al menos una vez al año, aunque eso implique tomar de su tiempo personal (Entrevista 1, 3, 6, 2021). Las motivaciones para publicar son muchas, incluso como para considerar utilizar su tiempo personal para hacerlo.
De las mayores motivaciones señaladas por los académicos, se encuentra la Internacionalización de la publicación, 169 académicos encuestados (véase el gráfico 1) y se considera una razón totalmente motivante para publicar, obteniendo la puntuación más alta en el cuadro 1. La persona académica de Ciencias de la Salud que fue entrevistada aseguró que esta motivación:
Es muy importante, es algo que permite tener mayor visibilidad del trabajo que uno hace, a nivel internacional. Sobre todo, que las publicaciones se divulgan por internet, ahora más que nunca y pues, da reconocimiento a la universidad mediante la afiliación. (Entrevista 1, 2021)
Figura 1
Motivaciones de los académicos
Cuadro 1
Razones que motivan a publicar a los académicos activos de la UNA encuestados
Razones que le motivan | Cantidad de académicos según escala | |||||
1 Nada motivante |
2 Poco motivante |
3 Medianamente motivante |
4 Motivante |
5 Totalmente motivante |
N/A* | |
Internacionalización de la investigación. | 7 | 5 | 15 | 40 | 155 | 3 |
La editorial o revista a la que decidió enviar su artículo. | 9 | 7 | 43 | 83 | 78 | 5 |
El financiamiento obtenido. | 36 | 30 | 51 | 34 | 34 | 40 |
La asignación profesional. | 12 | 10 | 36 | 66 | 89 | 12 |
Prestigio académico y profesional. | 7 | 6 | 15 | 57 | 138 | 2 |
Otras motivaciones personales. | 8 | 9 | 19 | 58 | 86 | 45 |
* No aplica
Fuente: Alfaro Martínez, R. (2022, p. 104)
Esta motivación se definió, para efectos de este estudio, como el alcance internacional que logra una investigación a través del reconocimiento de una comunidad académica o área disciplinar determinada (Alfaro, 2022). Como se señaló en la entrevista, permite una mayor visibilidad a quien publica, al mismo tiempo que se le otorga reconocimiento a la universidad a través de la afiliación; en el gráfico 1, se observa que esta noción es otra de las mayores motivaciones para los encuestados, el prestigio académico y profesional está estrechamente vinculado con la internacionalización de las publicaciones, con un total de 165 selecciones y resaltada en el cuadro 1 por 138 académicos como una razón totalmente motivante por la que deciden publicar. Para una de las personas entrevistadas, hacer investigación es un asunto de privilegio y, por tanto, considera que
esta condición que nos da la Universidad hay que aprovecharla, nosotros como sus académicas y académicos, pero también por un asunto de compartir esos aprendizajes con toda la población universitaria y la sociedad en general, una simplemente no puede quedarse con ese conocimiento, hay que hacer algo que impacte a la sociedad con ello. (Entrevista 7, 2021)
A esta visión de bien común, hace eco la opinión de la entrevista hecha a una persona académica de Ciencias de la Tierra y el Mar, quien aseguró que la internacionalización de las publicaciones no solo contribuye al prestigio académico o institucional, también,
permite tener un mayor impacto a nivel social, porque tal vez yo que estoy trabajando en una investigación que pueda traer y darle soluciones a un sector de la población muy específico. Por ejemplo, yo trabajo con arroz, realizo investigaciones de cómo hacer modificaciones genéticas que sean más resilientes al estrés de hídrico y de suelos y, tal vez, esa investigación le puede funcionar a los campesinos de Guanacaste, pero también a los productores de otra región. Ahí es donde se ve la verdadera internacionalización de la ciencia, cuando es palpable a nivel social. (Entrevista 3, 2021)
Para los académicos entrevistados, también está estrechamente vinculado con la posibilidad de gestionar redes académicas; la entrevistada que labora en las áreas de Filosofía y Letras y Ciencias Sociales ha cruzado horizontes de conocimiento con su publicación, pues fue invitada como par evaluadora en una revista de una universidad en República Dominicana; esta persona aseguró que, a raíz de sus publicaciones, la consideran en demasía para dar su opinión experta sobre el tema de liderazgo (Entrevista 5, 2021).
Este reconocimiento profesional se vincula con la tercera motivación que lleva a las personas académicas a publicar: en la Universidad Nacional, la categoría de asignación profesional es atendida por la Comisión denominada Carrera Académica, la cual busca garantizar y promover un nivel creciente de excelencia en las actividades académicas de la Universidad Nacional, según lo establecido en el Estatuto Orgánico, en la Reglamentación y Normativas vigentes (Comisión de Carrera Académica, 2023). Es importante aclarar que, para efectos de la UNA, esta valoración es por interés de las personas académicas, es decir, ellos solicitan esta evaluación, se les asigna un puntaje y, por consiguiente, una categoría.
En total, 89 académicos la señalaron como una razón totalmente motivante para publicar, tal y como se aprecia en el cuadro 1, la percepción de los entrevistados es bastante heterogénea cuando se les preguntó si consideraban que publicar les permite mejorar su estatus en Carrera Académica. Para las personas de Ciencias Exactas y Naturales, del área de Filosofía y Letras y las Ciencias Sociales, así como para el Centro de Investigación, Docencia y Extensión Artística, que sus publicaciones se puedan reflejar en este régimen y se traduzcan en un mayor puntaje es un gran incentivo (Entrevista 4, 5, 6, 2021). No obstante, hay investigadores que lo ven como algo burocrático, de medición ambigua o hasta light,
uno tiene que hacer una serie de papeleos que a mí honestamente me parecen estúpidos, porque, es demasiada la tramitología, pues, creo que son cosas que deberían ser más agiles, porque ahorita lo que provocan es que uno más bien no quiera someterse a la evaluación. (Entrevista 1, realizada a profesional de las Ciencias de la Salud, 2021)
Vamos a ver, si uno lo ve y lo analiza de forma cruda, con Carrera Académica si hay una compensación económica de por medio, por la producción intelectual, pero no se reconoce bien. A veces hay artículos que son de mucho peso o que tienen un impacto a nivel social muy importante, y que me den en Carrera Académica muy pocos puntos, o que del todo no me den nada. A veces, siento que esas cosas no son tan palpables a nivel social, es decir, como Carrera Académica puede medir eso para otorgar la puntuación que otorga. (Entrevista 3, realizada a profesional de las Ciencias de la Tierra y el Mar, 2021)
Aunque todo este tema de la evaluación de carrera Académica es una evaluación muy light, en realidad, vos para pasar de categoría en estos momentos es muy fácil, entonces, ahorita, según he visto, se está reformulando Carrera Académica, para que los criterios sean un poquito más fuertes, porque, para vos pasar de profesor instructor/licenciado a profesor 1, prácticamente con un artículo pasas a profesor 1. Entonces, en realidad es muy sencillo y si uno quiere ser autocrítico y si está dentro de la academia y todo esto, yo creo que los criterios deben ser un poco más pesados. (Entrevista 2, realizada a profesional de Ciencias Exactas y Naturales, 2021)
Incluso hay posiciones encontradas, tal es el caso de una persona entrevistada del Centro de Investigación y Docencia en Educación, quien ve Carrera Académica como un órgano institucional que fomenta la excelencia académica, pero, al mismo tiempo, considera que sus criterios de medición pueden entenderse con distintas interpretaciones, dando lugar a ambigüedades, incertidumbres o confusiones a la hora de calificar:
La calificación de carrera académica es un poco ambigua, como que una se esfuerza muchísimo en la investigación, pero tal vez, publica en una revista no tan reconocida y ya por eso la puntuación no es muy buena. Pero si una publicara en una revista que tiene un factor de impacto alto y lo somete a evaluación de carrera académica, sí le va bien. A pesar de todo eso, creo que carrera académica fomenta la excelencia entre sus académicos, yo creo que si este régimen se mejora, más académicos se sentirán más respaldados y con ganas de mejorar. (Entrevista 7, 2021)
Llama la atención que el Régimen de Carrera Académica asegura buscar la excelencia académica desde una lógica de integralidad de sus profesionales, pero, para una de las personas entrevistadas, es una práctica que la hace sentir distante:
En el mundo del arte, es importante pensar cómo acercarse a veces, porque, el asunto de producir esto o de generar publicaciones, a veces nos amarra y nos hace sentir lejanos, desde otras áreas diferentes al arte, algunos académicos estigmatizan las producciones de arte como poco rigurosas o que no tienen cabida en el campo de las publicaciones, cuando la realidad es distinta, lo único que cambia es el formato en el que presento mi trabajo. […] solo nos aleja y refleja un mundo muy academicista, hay que cambiar las cosas que la gente no la vea como lejana. Creo que esto también es un buen incentivo para la gente. (Entrevista 4, 2021, citado por Alfaro, 2022, p. 95)
De modo que la asignación académica, a pesar de ser una motivación para muchos académicos (véanse el gráfico 1 y el cuadro 1), también es una razón que le genera preocupación a la población docente de la UNA. El régimen funciona en tanto se refleje académica y salarialmente, este dista de ser integral y solo acrecienta la brecha entre los mismos académicos; por un lado, unos aseguran que es muy fácil subir en el escalafón salarial por lo que no apelan a la rigurosidad que se menciona en este reglamento. Otros, por su parte, aseveran que “el régimen limita a otras áreas del saber por tener un formato de presentación distinto” (Alfaro, 2022, pp. 95- 96), por lo que se puede considerar una motivación tanto positiva como negativa.
Asimismo, en el gráfico 1, se observa que 48 personas del total de académicos que respondieron el cuestionario seleccionaron las editoriales y revistas en las que publican como una de las motivaciones, esta información se puede cotejar con el gráfico 2 sobre los criterios y motivaciones de selección de editoriales y revistas. Al respecto, sobresalen los criterios que obtuvieron una selección superior a las 100 selecciones: temática de la revista, reputación, difusión de sus artículos, calidad de sus artículos y ser una revista de acceso abierto. Entre los que obtuvieron una selección inferior se citan: Impact Factor, audiencia, revista extranjera, política de derechos de autor y si es una revista de acceso restringido.
Figura 2.
Criterios y motivaciones de selección de editoriales y revistas
Fuente: Elaboración propia a partir de los datos de Alfaro Martínez, R. (2022, p. 97)
Para la persona del área de las Ciencias de la Salud entrevistada, además de estos criterios, es necesario que:
la revista debe de tener revisión por pares, tiene que tener comité editorial que se vea consolidado, también tiene que estar indexada, para mí es muy importante que este indexada porque eso da cierta visibilidad, […] y que no cobren por enviar el artículo, esto para mí es un factor definitivo. (Entrevista 1, 2021)
Durante la entrevista, esta persona aseguró no seguir ningún tipo de Factor de Impacto y añadió que su experiencia le ha llevado a darse cuenta de que es un criterio muy manipulable. Sin embargo, la realidad para las seis personas restantes es otra, a pesar de publicar en revistas de acceso abierto, consideraron que el ranking, el factor de impacto o la puntuación que tenga la revista es un indicador importante y una motivación más para elegir la editorial o la revista. Tal y como lo menciona la persona académica del Centro de Investigación y Docencia en Educación entrevistada, “académicamente, una busca que tenga credibilidad académica, que tenga impacto en el área disciplinar y que también en la sociedad. Pero creo que lo mínimo sería que esté indexada” (Entrevista 7, 2021).
Los criterios Difusión de los artículos y Revistas de acceso abierto llaman la atención, todas las personas entrevistadas consideran que el acceso abierto provee mayor difusión a las publicaciones, “las revistas de acceso abierto son fundamentales para favorecer la visibilidad del conocimiento y son las que más se consultan”, este académico también considera que las revistas de acceso abierto son las que tienen mayor consulta de lectores en formación, lo que incluso lleva a pensar que tienen un alto porcentaje de consulta y citación:
Es lo más fácil que la gente vea, especialmente estudiantes que andan buscando información para sus trabajos de investigación que yo creo, son unos de los principales lectores, no te van a ir a una revista que no te ofrecen artículos a texto completo. (Entrevista 1, 2021)
Para otra persona académica, esta relación tiene implícito un componente de democratización en el que todos salen ganando: el investigador, la institución y los lectores (Entrevista 7, 2021). Al triangular esta información con los datos obtenidos de la pregunta sobre en cuáles revistas y editoriales ha publicado, tanto en los cuestionarios como en las entrevistas a profundidad, se determinó que hubo una mayor tendencia de publicar en revistas de acceso abierto. De un total de 291 revistas mencionadas por las y los académicos, 196 son revistas de acceso abierto, entre las que sobresalen como las más citadas por los académicos las siguientes: Uniciencia, Educare, Letras, Revista Geográfica de América Central y la Revista de Biología Tropical.
Por su parte, 67 de las revistas mencionadas son de acceso restringido, entre las que fueron más mencionadas están las siguientes: Veterinary Parasitology: Regional Studies and Reports, Geophysical Research Letter, Langmuir Journal, Aquaculture Research, y Ticks and Ticks Borne Diseases. Algunos académicos de la UNA indicaron haber publicado en revistas de acceso abierto con APC, se registraron un total de 28 entre las que destacan Carbohydrate Polymers, Journal of Athletic Enhancement, Journal of Renewable Materials, Journal of Cleaner Production y Forest Ecology & Management (véase el gráfico 3).
Figura 3
Tipos de revista
Fuente: Alfaro Martínez, R. (2022, p. 99)
Es interesante la distribución temática, las publicaciones de acceso abierto se realizaron en revistas de distintas áreas disciplinares, tanto de ciencias sociales y letras como de ciencias exactas y naturales pertenecientes en su mayoría a las editoriales EUNA y EUCR. Por lo tanto, se puede afirmar que las revistas de acceso abierto no están concentradas solo en un campo del conocimiento en específico. Las revistas de acceso restringido mencionadas por los académicos pertenecen esencialmente a editoriales como Elsevier, Wiley o Springer Publishing, y corresponden a las áreas de la ciencias exactas y naturales (véase el gráfico 4).
Figura 4
Editoriales según cantidad de revistas mencionadas
Fuente: Alfaro Martínez, R. (2022, p. 101)
En el caso de las revistas con Article processing charge (APC, por sus siglas en inglés), que, a pesar de tener una parte de sus artículos en acceso abierto, requieren que las personas autoras o las instituciones que financian la investigación cancelen un monto denominado tarifa de cargos de publicación o APC por publicar un artículo en estas revistas. Los montos por pago de APC, varían de revista en revista y los define la editorial, las tarifas oscilan entre los $200 y $10 100 dólares estadounidenses (Elsevier, 2023a), a estos precios se les debe sumar el impuesto correspondiente.
Elsevier (2023a), también señala que los APC se revisan periódicamente y están sujetos a cambios, por lo que el precio podría variar de acuerdo con una serie de criterios ya establecidos por la editorial, como calidad de la revista, procesos editoriales y técnicos de la revista, consideraciones competitivas o condiciones de mercado (Elsevier, 2023a). Solo por ilustrar, en la figura 1, se visualiza la lista de precios de la editorial Elsevier, en la cual aparece el monto de APC que se debe pagar por publicar en Carbohydrate Polymers (última línea de la tabla), una de las revistas —varias veces— mencionada por los académicos activos de la Universidad Nacional.
Figura 5
Lista de precios, editorial Elsevier, 2023
Fuente: Elsevier, Article Publishing Charge (APC) price list, (2023b)
A algunas personas entrevistadas, esta situación les genera inconformidad, aseguran que “el conocimiento debe ser público, la información debe ser pública, porque estamos generando conocimiento y más en estos tiempos tan complicados” (Entrevista 2, 2021). También, quienes consideraron un conflicto ético no hacer el conocimiento accesible para la sociedad cuando se trata de financiamiento del Estado, “imagínate que a un académico que le esté pagando con dineros públicos, decida publicar sus investigaciones financiadas con ese dinero en una revista de pago, como que no es correcto, como que no es ético” (Entrevista 3, 2021). Otros académicos entrevistados, mencionaron opiniones un tanto más radical al comentar lo siguiente:
A mí me parece que hay que eliminar cualquier publicación que sea de suscripción pagada, o sea, hay que buscar formas en que el conocimiento sea libre, más el conocimiento científico, y, sobre todo, cuando se trata de algo generado en una universidad pública. (Entrevista 1, 2021)
Lo cierto es que, indistintamente de cuán radical sea la opinión de unos u otros, se logró determinar que las personas académicas de la universidad reconocen el valor que implica democratizar la información. Al respecto, el ganador del Premio Nobel Joseph E. Stiglitz sostuvo que, “la buena información es necesaria para el funcionamiento de un Estado democrático fuerte” (2021, p. 7), añade que:
la información, en tanto bien común, es vital para garantizar ‘la participación de los ciudadanos y el espacio cívico’, que se identifica como un ámbito de acción prioritaria en el Llamamiento a la Acción en Favor de los Derechos Humanos (Stiglitz, 2021, p.7).
En concordancia con lo expresado por Stiglitz, una de las personas académicas coincide en que los esfuerzos por publicar en revistas de acceso abierto “va en la línea de retribución a la sociedad de lo que hacemos, de que somos financiados con fondos públicos” (Entrevista 4, 2021). Esto llevó a indagar en el tipo de apoyo recibido por parte de las personas académicas para realizar sus publicaciones, el financiamiento recibido es de tipo económico y no económico, este último contempla acceso a equipo técnico y especializado, reconocimiento de jornadas o cargas académicas, entre otros.
En el gráfico 5, se observan los tipos de ayuda más recibidos por los académicos encuestados, en un porcentaje mayor (128 selecciones), señalaron que sus investigaciones se desarrollaron en el marco de un proyecto, programa o actividades académicas (PPAA), de modo que reconocen esta vinculación como una vía de financiamiento. La asignación de tiempo para investigación fue la segunda categoría más denotada por los académicos, con un total de 91 selecciones; y el apoyo con equipo técnico y tecnológico, con 44 selecciones. Estas fueron las tres categorías reconocidas por los encuestados que corresponden a apoyo de tipo no económico, aunque no están exentas de gasto público.
Figura 5
Tipo de apoyo recibido
Fuente: Elaboración propia a partir de Alfaro Martínez, R. (2022, p. 102)
Por otra parte, en el apoyo de tipo económico, sobresalieron el financiamiento de la investigación, así como el otorgado para la publicación del artículo, con un total de 55 y 34 selecciones, respectivamente. Adicional a estas formas de subsidio económico por parte de la UNA, los académicos entrevistados añadieron el esfuerzo que la universidad realiza para asignar estudiantes asistentes que colaboren en determinado proyecto, pero también en el apoyo económico para sufragar los gastos de traducción de un artículo (Alfaro, 2022).
Acerca de esto último, una de las personas académicas entrevistadas aseguró que esta ayuda se otorga a los artículos que se van a publicar en revistas de peso y con un factor de impacto alto (Entrevista, 2); como lo mencionaron, en muchas ocasiones, esta ayuda por parte de la universidad no se les otorga como le sucedió al académico de la Entrevista 6 (2021). Sin embargo, de las siete personas entrevistadas, una logró obtener este beneficio: “Sí, he recibido apoyo. Fue una contribución que solicitamos a Vicerrectoría de la Investigación, hablamos con don Jorge y él nos ayudó” (Entrevista 3, 2021).
De todas las entrevistas realizadas, llama la atención la experiencia particular que tuvo la persona académica del Centro de Investigación y Docencia en Educación, cuando se le consultó “¿Recibe algún financiamiento por parte de la universidad para publicar sus investigaciones?”, aseguró que,
No, del todo no. Una es la que tiene que andar viendo como subsana esas cuestiones, por ejemplo, cuando publiqué en esa revista de Emerald, había que publicar en inglés, no obtuvimos financiamiento por parte de la Universidad, todo nos tocó cubrirlo por nuestra cuenta, entonces lo que tuve que hacer fue “asociarme” con otra persona que sabía esto del inglés para que ella lo tradujera, y así, fue como logré publicar en esa revista, eso sí, el escrito tuvo que salir a nombre de esa persona también aunque no tuviera mayor injerencia en el contenido. (Entrevista 7, 2021)
Asimismo, esta persona, alegó que debió “asociarse” por la falta de apoyo de la universidad, ante esto, es importante traer a la palestra la opinión de la persona académica de Ciencias Exactas y Naturales, quien aseguró no haber publicado el artículo que sometió a apoyo por traducción por no obtener nunca respuesta de aprobación o rechazo por parte de la unidad competente (Entrevista 6, 2021). Si bien la Universidad Nacional realiza grandes esfuerzos para contribuir a los diálogos científicos a nivel nacional y mundial, sería importante tener mayores mecanismos de control y seguimiento de estos. Es decir, buscar alternativas en conjunto para que las experiencias de las personas académicas de la entrevista 6 y 7 se parezcan, cada vez más, a las vivencias y oportunidades de la persona académica de la entrevista 3.
Para Richard M. Ryan y Edward L. Deci, las diferentes teorías acerca de la motivación reflejan ciertas preocupaciones al considerarlas como un fenómeno unitario que oscila desde muy poca motivación hasta mucha. Los autores sugieren que la motivación no es un fenómeno unitario porque las personas no solo tienen diferentes cantidades, sino también diferentes tipos de motivación (2000, pp. 54- 55), es decir, no solo varía cuánta motivación tienen, sino también la orientación de esta. Con respecto a lo propuesto por Ryan y Deci, y de acuerdo con lo expuesto por los académicos y lo analizado en la investigación, se logró determinar que las motivaciones de las personas académicas son, a su vez, positivas y negativas.
Para las personas académicas entrevistadas y encuestadas, su principal motivación se basa en que sus publicaciones se conozcan internacionalmente, que generen impacto en su área disciplinar y, de esta forma, sean útiles para la sociedad, razón por la cual la mayoría de los académicos coincidieron en publicar en revistas de acceso abierto. Las publicaciones con esta filosofía tienden a contribuir a la internacionalización de las publicaciones y generar impacto para el beneficio de la sociedad. Al investigar las motivaciones de los investigadores, se logró comprender por qué eligen publicar en revistas de acceso abierto y cómo esto contribuye a garantizar que el conocimiento esté disponible de manera equitativa.
El acceso abierto permite un alcance mayor en la investigación, con audiencias más amplias, incluidas aquellas sin acceso a bibliotecas académicas o que se encuentran en países con recursos limitados. Investigar las motivaciones posibilitó identificar las prácticas exitosas y los desafíos relacionados con la publicación en acceso abierto, como el desarrollo de políticas y estrategias para ampliar, aún más, el alcance global de la investigación. La democratización del conocimiento fomenta la colaboración y el intercambio de diferentes ideas entre las personas investigadoras según sus disciplinas y regiones geográficas. Al eliminar estas barreras, las revistas de acceso abierto facilitan la colaboración y promueven la sinergia entre los investigadores. Además, al investigar las motivaciones, fue posible entender que las prácticas de estos investigadores promueven la colaboración y la difusión del conocimiento, que, a su vez, beneficia los avances científicos y el progreso de la humanidad en diversas áreas
El financiamiento y el apoyo para la publicación son motivaciones que oscilan entre los postulados de Ryan y Deci para los académicos de la UNA, puesto que son motivaciones que, al mismo tiempo, tienen matices negativos; es una motivación positiva, pero, al mismo tiempo, puede convertirse en negativa. Las personas académicas que han optado por este beneficio señalaron que es una oportunidad a nivel profesional muy importante; sin embargo, aseguraron que depende mucho de criterios de prestigio y calidad para ser beneficiarios de este apoyo (Alfaro, 2022). Estos criterios, prestigio y calidad, a los que hicieron alusión los académicos, se caracterizan por ser poco claros y los catalogaron como ambiguos al no contar con una definición expresa de lo que entiende la universidad o la dependencia evaluadora como definición o alcance para cada uno de estos rubros. Para aquellos académicos que concursaron por los diferentes fondos para el financiamiento de sus publicaciones y no fueron beneficiados, este aspecto se tiñe de desmotivación; y quienes aún no han concursado, lo perciben como una oportunidad lejana o desconocida a su realidad académica.
Lo anterior se puede vincular a la idea de obtener una mejor retribución económica en términos salariales y en la posibilidad de obtener un incentivo, tanto económico como no económico, aspectos que abordan los planteamientos de la teoría de las expectativas o el modelo de motivación, propuesto por Lyman Porter y Edward Lawler a finales de la década de los sesenta. Los psicólogos señalaron que su vinculación radica entre el rendimiento, la satisfacción y las recompensas que encuentren los individuos al realizar cada una sus labores, además, predice que un individuo hará un esfuerzo movido por una motivación si percibe una relación estrecha entre el esfuerzo y el rendimiento, así como entre este y las recompensas, y estas últimas con la satisfacción (Porter y Lawler citado por Dorta y González 2003; Padovan, 2020)
Aunado a la triada propuesta por Porter y Lawler, los criterios y motivaciones de las personas entrevistadas y encuestadas para elegir una revista o editorial se relacionan con las razones que le motivan a publicar al priorizar la calidad de los artículos que se publican, la difusión que se les da y la reputación de la revista, sumado a la idea de publicar en revistas con las políticas de derechos de autor y un factor de impacto que satisfaga sus expectativas y criterios propuestos por la universidad.
Investigar las motivaciones que impulsan la elección de cada revista en la cual se desee publicar proporciona información valiosa sobre los factores que influyen en la percepción de calidad de una revista, estos aspectos pueden coadyuvar a las diferentes entidades que financian estas investigaciones en el desarrollo de criterios de evaluación efectivos para elegir revistas confiables y de alta calidad según el criterio profesional. Este análisis determinó que el deseo de maximizar el impacto y la visibilidad de la investigación en su área disciplinar influye en la escogencia de la revista, esto permitió comprender cómo las personas académicas perciben el impacto de una publicación en su campo académico y, por consiguiente, cómo influye en su carrera profesional.
En este sentido, al investigar tales motivaciones, elegir una revista para publicar sus hallazgos puede ayudar a identificar los factores que impulsan su comportamiento, como el reconocimiento académico, el prestigio de la revista, las oportunidades de colaboración y el avance en el área disciplinar. Comprender estos factores, también, permite a los profesionales de la bibliotecología adaptar sus servicios y recursos para satisfacer mejor las necesidades y motivaciones de los investigadores. Las dinámicas de publicación están cambiando rápidamente con la evolución de las tecnologías y las posibilidades que el acceso abierto ofrece; por tanto, investigar las motivaciones posibilita identificar cómo estas tendencias influyen en el acceso y democratización de la información en la sociedad.
Se concluyó que conocer las opiniones de las personas académicas que compartieron sus experiencias permite construir y mejorar las políticas, las normativas y los reglamentos institucionales atinentes al contexto al considerar sus necesidades y su bagaje, por lo que es importante incluir a todos los actores involucrados en los procesos de toma de decisiones. Se recomienda consultar el texto completo en Alfaro Martínez (2022), Propuesta de lineamientos amparados en la filosofía del acceso abierto para la regularización y normalización de la distribución de las publicaciones realizadas en la Universidad Nacional, Costa Rica, tesis para optar por el grado de licenciatura en Bibliotecología y Gestión de la Información, para conocer más de los hallazgos de este estudio.