in Revista Ensayos Pedagógicos
Sistematización de experiencia: transformación de las prácticas académicas del curso Introducción a la Administración de Negocios, Recinto de Guápiles, Universidad de Costa Rica, en el contexto del COVID-19
DOI: 10.15359/rep.18-2.8
Resumen
Descripción:
El presente artículo describe las buenas prácticas académicas adoptadas tras la crisis sanitaria mundial, que ha incidido en el ámbito educativo.
Objetivo:
Detallar los pasos para lograr la transformación en las prácticas académicas del curso Introducción a la Administración de Negocios de la Universidad de Costa Rica.
Metodología:
Se ha empleado la metodología de cinco tiempos recomendada por Jara (2011).
Resultados:
La gran transformación radica en que la metodología pasa a ser 100 % virtual. El docente debió diseñar, previamente, el material didáctico para su clase sincrónica, así como adicionar elementos asincrónicos que le permitan abordar los objetivos y compartirlos con el estudiantado, al mismo tiempo que se apoya con herramientas digitales no tradicionales.
Conclusiones:
El contexto mundial obliga a los docentes a modernizar la estructura de las aulas físicas o virtuales, en función del estudiante, con espacios dinámicos e interactivos. Asimismo, se concluye que las prácticas académicas no son una ocurrencia, consisten, más bien, en un proceso planificado, en el cual la autoevaluación y el acompañamiento con pares es sumamente provechoso para el diseño didáctico.
Main Text
Introducción
Las universidades y sus aportes sustantivos como la docencia, la investigación y la acción social permiten lograr un papel protagónico en el desarrollo del mundo. “A través de estas instituciones que transmiten a los individuos el conocimiento intelectual indispensable para la modernización y la democratización de la sociedad” (Castillo-Cabeza et al., 2016, p. 1), “se promueve una tendencia basada en el conocimiento relevante que transforma y beneficia a las economías” (Medina et al., 2020, p. 19).
En Costa Rica, en coordinación entre sectores como Gobierno y entidades universitarias, se ha trabajado en las últimas décadas para garantizar el acceso a la educación superior, en la búsqueda de formar ciudadanos productivos. Para Ángeles (2019):
Las universidades públicas en Costa Rica son resultado del deseo de dotar al país de instituciones que contribuyan con la formación de su gente; con el fin de mejorar la calidad y bienestar de la población del país. Hoy día, Costa Rica cuenta con 5 instituciones de Educación superior estatal que fueron creadas para atender diferentes necesidades de profesionales en diversas áreas del conocimiento. (párr. 1)
Herrera y Suárez (2021) afirman que “se asumen las universidades como nodos estratégicos del sistema nacional de innovación” (p. 140). La función principal de actores como las instituciones universitarias es gestionar actividades relacionadas con la innovación (Brem y Radziwon, 2017). Se destaca, en este sentido, la importancia de generar esa innovación desde las bases académicas, para garantizar que el aprendizaje adquirido en las aulas se vincule con los espacios sociales y obtener, con ello, rendimientos redituables en el tiempo.
En cuanto al impacto de la crisis sanitaria mundial, que ha incidido en todos los sectores, incluido el ámbito educativo, se “sufrió varios cambios transcendentales en donde se debía tomar estrategias inmediatas” (Fonseca-Páez y Mancheno-Saá, 2021, p. 971). Ante la transformación requerida, Gleason y Rubio (2020) advierten que “las universidades están replanteando sus enfoques” (p. 2).
Pardo y Cono (2020) señalan que “la transición no es automática ni tiene que ver con inyectar más tecnología, sino con un proceso ambicioso capaz de integrar lo tecnológico, lo cognitivo, lo relacional y lo pedagógico” (p. 23). Lo anterior evidencia la necesidad de una transición para renovar y adaptar las tecnologías, así como las metodologías, el conocimiento y el aprendizaje (Paredes-Chacín et al., 2020). Es evidente que estas modificaciones a los procesos académicos deben mejorar el diseño formativo; en esta línea, García-Gutiérrez y Ruiz-Corbella (2020) señalan que “necesitamos propuestas innovadoras para romper con dinámicas y modos de hacer, para experimentar nuevos modos de desarrollar procesos y proyectos educativos” (p. 37).
En este contexto, la Universidad de Costa Rica ha logrado articular esfuerzos como parte de un proceso disruptivo que garantiza la continuidad de la formación académica en beneficio de la institución, el estudiantado, los docentes y la sociedad en general. Alfaro (2020) indica que:
Más de 3000 docentes capacitados y la implementación de la virtualidad al 100% en los cursos de la institución, es el resultado del Plan de Adopción del aprendizaje híbrido o blended learning, un proceso liberado por la Vicerrectoría de Docencia, a través de MECTICS. (párr.1)
El Recinto de Guápiles, más precisamente la Cátedra de Negocios, se ha adaptado a las directrices de la universidad y ha implementado una serie de acciones que garantizan la continuidad del proceso de aprendizaje. Por lo tanto, el objetivo de este reporte es sistematizar la experiencia vivida, con la finalidad de describir los pasos para lograr la transformación en las prácticas académicas del curso Introducción a la Administración de Negocios, así como evidenciar su aporte en materia de innovación y emprendimiento. La utilidad radica en la importancia de describir las buenas prácticas adoptadas en tiempos de pandemia, lo cual contribuye a una construcción conjunta de vivencias para continuar avanzando en el cambio del sistema educativo, al mismo tiempo que brinda un marco conceptual referido al papel del emprendedor universitario.
Esta sistematización se divide en cinco apartados: primero, se contextualiza el desarrollo del curso; segundo, se aborda la conceptualización de ejes temáticos relacionados con el estudio; tercero, se estructura el marco metodológico; cuarto, se presenta la sistematización de la experiencia en sí; quinto, se sintetizan las reflexiones y conclusiones.
Antecedentes
Contexto general
Durante la pandemia del COVID-19 y en apego a las recomendaciones del Ministerio de Salud del país, la Universidad de Costa Rica adoptó una serie de directrices ante el nuevo coronavirus; algunas de las acciones más representativas son:
- Según la Oficina de Divulgación e Información, la primera acción que tomó la institución el 9 de marzo del 2020, en conjunto con el Centro de Coordinación Institucional de Operaciones, fue informar que, a raíz de la pandemia, el personal docente, el administrativo y el estudiantado que presentara algún tipo de síntomas de gripe podría ausentarse y trabajar desde su casa.
- Ese mismo mes, el día 11, el Centro de Coordinación Institucional de Operaciones informa a toda la comunidad que se suspenden las clases presenciales y recomienda implementar la modalidad de enseñanza virtual.
- La Escuela de Administración de Negocios, en el comunicado EAN-M-343-20 del 17 de marzo del 2020, gira la instrucción de suspender totalmente la docencia presencial, basado en la Resolución R-95-2020 de la Rectoría Universitaria.
- La Vicerrectoría de Docencia indica el 1 de abril del 2020 que todas las personas docentes deben priorizar la utilización de la plataforma virtual de la universidad (Mediación Virtual).
- Más recientemente, el 2 de febrero del 2021, el Centro de Coordinación Institucional de Operaciones ratifica que las actividades académicas se continúen ejecutando mediante la modalidad virtual, sin ninguna afectación de la calidad de estas.
Contexto específico
El curso Introducción a la Administración de Negocios se ha impartido por más de trece años en el Recinto de Guápiles para las carreras Dirección de Empresas (última promoción de 2015) y Contaduría Pública (carrera vigente), las cuales mantienen un vínculo con la Escuela de Administración de Negocios, sus autoridades administrativas y las instancias de coordinación académica, por medio de una carta de entendimiento que se actualiza cada cierto periodo.
Lo anterior permite participar de forma activa en las diversas cátedras, secciones y eventos de alta trascendencia, como las ferias de negocios denominadas Expo-Innova y Generación E, las cuales cumplen con la entrega de información y otros requisitos solicitados por dicha escuela, según los acuerdos firmados.
Pese a las condiciones globales de la pandemia, el curso se ha impartido de manera virtual, en apego a las instrucciones de la Cátedra de Negocios y la Escuela de Administración misma. Es importante destacar que las prácticas académicas también se adaptaron para lograr la participación de los equipos de trabajo en las ferias de innovación y emprendimiento, así como para el desarrollo del curso. En este contexto, Cordero (2021) precisa que, entre ambas ferias, se presentan más de cien ideas de negocios con una propuesta de valor innovadora y alto sentido de responsabilidad social. Molina (2020) destaca que, tras la virtualización de las actividades académicas, la feria se ejecutó en una plataforma también virtual, lo cual permitió triplicar las visitas a los estands, en comparación con los años anteriores.
Marco teórico
En esta sección, se abordan las definiciones relacionadas con el tema de estudio, lo cual permite contextualizar el proyecto y proporcionar al lector un marco de referencia. Inicialmente, se precisa que las universidades son, en esencia, generadoras de espacios donde se construye el conocimiento, se propician entornos formativos y los participantes interactúan. Según Argueta y Jiménez (2017), la universidad es “generadora y difusora del conocimiento a través de sus docentes e investigadores, forma talento humano con capacidad crítica y reflexiva” (p. 2). Para garantizar un proceso de aprendizaje mediante el que efectivamente se construya conocimiento, es importante diseñar estrategias didácticas adecuadas al contexto inmediato; para Quinquer (1997, según se cita en García, 2019):
Una estrategia didáctica es una forma determinada de organizar las actividades pedagógicas con el propósito de conseguir que los estudiantes puedan asimilar nuevos conocimientos y puedan desarrollar capacidades o habilidades cognitivas. Las decisiones que toman los docentes se refieren al tipo de situaciones que se crean en el aula para conseguir que los estudiantes aprendan y construyan conocimiento. (p. 4)
Asimismo, el diseño académico se pretende construir desde un marco conceptual hasta llegar a un escenario actitudinal, donde el estudiante pueda ser parte del proceso:
Ello implica una valoración adecuada y equilibrada de contenidos de los distintos ámbitos (conceptual, procedimental, actitudinal) y una visión del aprendizaje científico que dé el suficiente protagonismo al alumno, entendiendo que éste ha de implicarse en la realización de actividades adecuadamente orientadas que permitan el aprendizaje de contenidos. (García y Martínez, 2003, p. 80)
Estas intenciones formativas pueden tener diferentes formatos (objetivos, ejes problemáticos o preguntas orientadoras) y buscan direccionar el proceso por un rumbo específico y claramente delimitado por prácticas académicas, las cuales, para Becerra y Fonseca (2009), se definen como un espacio de enseñanza ligado a un objetivo de aprendizaje.
Freire (1970) marca un precedente importante en la forma de abordar el contenido de un curso y la forma en que el estudiantado debe asumir su papel en el proceso de aprendizaje, “elaborada con él y no para él” (p. 42). En este marco, el estudiante será responsable de su propio desarrollo y con esta postura podrá involucrarse en los procesos de aprendizaje de manera tanto activa como asertiva. García y Martínez (2003) enfatizan “la evolución, modificación, ampliación y restructuración de las concepciones didácticas iniciales de los futuros docentes, centrándonos en la autocrítica de las propias ideas y en el análisis de las nuevas opciones que han ido desarrollándose en los últimos años” (p. 84). Para Vázquez-Mata (2008), “se hacen necesarios nuevas tecnologías y metodologías” (p. 5). En el contexto actual, se aceleró el cambio recomendado desde hace varios años, las prácticas académicas han tenido que migrar y cambiar tras el proceso de virtualización.
Por otro lado, y para finalizar este apartado, se precisan los conceptos generales del curso en estudio, los cuales representan su producto final. Emprendedor es “quien aborda la aventura de iniciar un negocio, lo organiza, busca capital para financiarlo y asume todo o la mayor cantidad de riesgo” (Silva, 2013, p. 15). En esta línea, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico y Eurostat (2007) define que la innovación implica crear algo nuevo o mejorarlo significativamente, sea un bien o un servicio, hecho que implica el cambio en las prácticas empresariales para luego iniciar un proceso de comunicación y comercialización del producto.
Metodología
En esta unidad textual, se define el marco metodológico que mejor se adaptó a las necesidades y características de la sistematización de la experiencia. Según Jara (2011), el proceso permite “obtener aprendizajes críticos de nuestras experiencias” (p. 3). La importancia del método radica en que genera un conocimiento integral basado en los saberes académicos, las reflexiones y el aprendizaje crítico.
Se ha empleado la metodología de cinco tiempos recomendada por Jara (2011), que incluye un proceso en el que se define un punto de partida de la experiencia basada en la participación y evidencia; requiere, además, formular un plan de sistematización, recuperación del proceso vivido, reflexiones a fondo, hasta finalizar en el punto de llegada. En las siguientes secciones, se desarrolla el modelo.
Punto de partida
La transformación de las prácticas académicas surge como una respuesta al contexto sanitario mundial. En conjunto con la Cátedra de Negocios, se ejecutó una serie de cambios estructurales a la metodología de enseñanza, con el propósito de ajustarse a las nuevas condiciones mundiales. Por lo tanto, resulta valioso plasmar la experiencia vivida en los dos años de pandemia, para un curso que requiere una alta virtualidad, desarrolla una feria de emprendimiento históricamente ejecutada de manera presencial e involucra en sus quehaceres actores sociales (docente y estudiantes), quienes se enfrentaban por primera vez al contexto virtual.
Perfil del estudiante
Se identifica, en mayor proporción, un sector poblacional estudiantil de primer ingreso que experimenta, por primera ocasión, el sistema de educación superior, personas jóvenes, provenientes de diversos colegios y, en su mayoría, de zonas rurales.
Objetivo del curso
La carta al educando inicia con el siguiente objetivo general: brindar al estudiante los fundamentos teóricos y prácticos para adquirir una visión contemporánea de los temas de negocios, buscando contribuir en su formación inicial como un profesional emprendedor, que requiere desenvolverse en un mercado globalizado, de manera competitiva, ética y con responsabilidad social.
En este sentido, la temática del curso permite conectar los elementos primordiales de los negocios con los ejes del saber: economía, administración, mercadeo, contabilidad y finanzas, sobre los cuales se profundizará a lo largo de la carrera universitaria. Al ser un curso introductorio, se busca que el profesional de contaduría pública se prepare en las áreas técnicas de la administración, como una persona emprendedora y consiente de la importancia que implica la dinamización de los negocios para el país. Los primeros ejes temáticos son teóricos, con los cuales se busca asociar casos de aplicación que permitan profundizar el análisis crítico del estudiantado y, conforme avanza el semestre, se suman contenidos prácticos, entre ellos el tema de contabilidad y finanzas.
Plan de sistematización de la experiencia
Este reporte es una sistematización en retrospectiva de los acontecimientos vividos en los dos años de pandemia, que abarcan el I semestre del 2020 y el I semestre del 2021. A partir de los datos almacenados en la plataforma oficial de la Universidad de Costa Rica (Medicación Virtual), los correos institucionales, el chat oficial con los estudiantes vía telefónica, los videos grabados de las sesiones sincrónicas, las experiencias compartidas en la Cátedra de Negocios y el Recinto de Guápiles, propiamente, así como la participación en la Feria Virtual de Generación E, se reconstruye y ordena la información.
Objetivo de la experiencia
Describir los procesos que se desarrollaron en el curso Introducción a la Administración de Negocios impartido en el Recinto de Guápiles de la Universidad de Costa Rica en el contexto de la pandemia, para reconocer los cambios adoptados en las prácticas académicas, al mismo tiempo que se evidencia el fomento de la innovación y el emprendimiento, desde la carrera Contaduría Pública, para la región.
Delimitación
Temporalmente, el curso se desarrolló en dos semestres distintos que comprenden el periodo desde el 9 de marzo del 2020 al 19 de julio del 2020 (primer semestre 2020) y el 15 de marzo del 2021 hasta el 1 de agosto del 2021 (primer semestre 2021). Geográficamente, se imparte en la Sede del Atlántico de la Universidad de Costa Rica, Recinto de Guápiles. La experiencia fue compartida con un total de 78 estudiantes. El curso se encuentra en el primer semestre de la malla curricular de la carrera Contaduría Pública.
Eje central de la experiencia
La transformación de las prácticas académicas del curso Introducción a la Administración de Negocios, en el contexto de la pandemia, para un curso que contiene tópicos de emprendedurismo.
La experiencia en sí: reconstrucción de la historia
Las actividades desarrolladas en el curso están plasmadas en la carta al estudiante, con un cronograma que incluye asignaciones individuales, casos grupales de estudios, pruebas cortas, exámenes, lecturas y similares, abordados a lo largo del semestre. Esto se construye previamente, desde la Cátedra de Negocios, en colaboración con todos los docentes que la conforman, lo cual permite uniformidad y estandarización en todas las sedes y recintos de la universidad. Asimismo, se incluye en la carta al estudiante una serie de pasos y avances que este deberá entregar para que desarrolle su idea de negocio y, posteriormente, presente el producto o servicio ideado en el ciclo lectivo. Únicamente dos grupos seleccionados participan en la Feria de Generación E, efectuada desde la Coordinación de las Ferias de Innovación y Emprendimiento de la Escuela de Negocios, todos los años. Tradicionalmente, estas actividades se llevaban a cabo de manera presencial, pero los docentes de la Cátedra de Negocios tomaron acuerdos para virtualizar al 100 % las prácticas académicas y lograr cumplir con el desarrollo del curso.
Secuencia didáctica
Las primeras semanas consistieron en un proceso de adaptación por parte de la universidad, el docente y el estudiantado. Por lo tanto, las rutas de acción acogidas durante el desarrollo académico estuvieron relacionadas con proporcionar diálogos, mensajes de apoyo, compartir los comunicados oficiales de la universidad y generar espacios que posibilitaran reducir los niveles de ansiedad o temor frente a la situación mundial. El curso se caracteriza por ser de naturaleza conceptual, procedimental y actitudinal, lo cual genera una amplia posibilidad de adoptar diversas estrategias didácticas, entre las cuales se pueden mencionar: estudio de casos, aula invertida, gamificación, trabajo colaborativo, entre otros, que se abordarán en las siguientes líneas. En la Tabla 1, se mencionan las primeras prácticas académicas aplicadas en el curso para el tema I:
Como se aprecia en la Tabla 1, las sesiones sincrónicas están apoyadas con herramientas digitales, como Zoom. Por lo tanto, el estudiante debió recibir el enlace de la sesión para acceder a la clase. La primera semana cada participante tuvo la posibilidad de encender su cámara y presentarse con sus compañeros. Posteriormente, se compartió la carta al estudiante, que se preparó de previo desde la Cátedra de Negocios, donde se indica todas las actividades y asignaciones que se efectuaron a lo largo del curso.
El siguiente paso fue presentar el material didáctico confeccionado por el docente. Con- tiene los principales conceptos del texto oficial del curso, el capítulo referido a la unidad temática, ilustraciones, ejemplos y preguntas abiertas para interactuar. Estas primeras semanas fueron magistrales, pero siempre propiciando espacios estratégicos de preguntas abiertas, en los cuales el alumno pueda participar y se genere un ambiente de colaboración.
Finalmente, se asignó el proyecto correspondiente a la Feria de Negocios GE. Para ello, se creó, desde la Cátedra de Negocios, una herramienta digital interactiva en Genially (esta es de uso exclusivo de la Cátedra de Negocios, por lo tanto, no se aborda en la presente sistematización). Se conformaron los equipos de trabajo de manera aleatoria y se dividió la sesión en subsalas grupales, para que el estudiantado se
conociera, estableciera las reglas de trabajo y seleccionara un coordinador para su equipo de trabajo. Es importante señalar que, en ocasiones repetidas, algunos estudiantes presentaban problemas de conexión (Internet), salían y entraban a las sesiones en diferentes tiempos; por esta razón, todas las sesiones sincrónicas eran grabadas y, posteriormente, compartidas por medio de un enlace en YouTube, en un espacio creado en la plataforma virtual. Asimismo, el alumnado tuvo la posibilidad de interactuar con el docente y sus compañeros, en un grupo privado de WhatsApp, que se crea con el consentimiento de todos.
Como parte de las asignaciones asincrónicas, se compartió, desde Mediación Virtual, notas técnicas referidas a la unidad temática, con ejemplos actualizados de nuestro país; este material se preparó antes desde la Cátedra de Negocios. Adicionalmente, se asignó un caso de estudio individual, que el estudiante debió resolver de manera asincrónica y entregar en la plataforma de Mediación Virtual al docente, quien lo revisó y realizó una retroalimentación por este mismo medio, al igual que una retroalimentación general del caso en las sesiones sincrónicas.
Las siguientes semanas se intentó propiciar un escenario donde el estudiantado tuviera una mayor participación y se sintiera parte del proceso académico. Ello se logra gracias a que el estudiante tiene más familiarización con la virtualidad. Se abordaron los contenidos relacionados con el tema de administración, apoyados en el material didáctico preparado y presentado por el docente en la sesión sincrónica (lo indicado en la Tabla 2). Además, se realizaron preguntas abiertas que permitieron repasar las notas técnicas.
El siguiente paso fue moderar las exposiciones grupales trabajadas bajo la estrategia didáctica de aula invertida. Previamente, se asignó tanto el tema como el material a los equipos y en el programa del curso se detalló una rúbrica de evaluación con lo mínimo esperado en cada presentación grupal; posteriormente, los grupos investigaron y prepararon una intervención en la sesión sincrónica. Lo anterior genera trabajo colaborativo, participativo y activo en la construcción del conocimiento, igual que estrategias de comunicación, uso de herramientas digitales, entre otros aspectos de socialización. Resulta apropiado recalcar que en la mayoría de los casos hubo una resistencia del estudiante por habilitar su cámaras.
Además, en estas semanas, se aplicó la primera prueba corta en la plataforma de Mediación Virtual. Los estudiantes tuvieron las instrucciones antes, con las cuales se les indicó que debían habilitar sus cámaras de Zoom y, en un espacio temporal concreto, completar la asignación. Una vez finalizada la prueba, el sistema generó automáticamente la nota obtenida; cualquier duda o consulta fue abordada en esta misma semana. Para finalizar la sesión sincrónica, se abrió un espacio en el que los equipos de trabajo se reunieran en sesiones grupales para avanzar desde la plataforma digital MURAL, con su trabajo final. Tal plataforma les permitió a los estudiantes participar en tiempo real en la construcción de sus avances, en todo el semestre.
Como asignación asincrónica, se confeccionó un material audiovisual en YouTube que incluía ejemplos prácticos, con la finalidad de reforzar los temas vistos en clase, y se asignó un caso de estudio individual. Es importante mencionar que los estudiantes siempre tuvieron acceso a horas de consulta (fuera del su horario de clase) y, en estas semanas, varios hicieron uso del espacio, lo cual reflejó un compromiso o preocupación con su proceso académico. Surgieron algunas dudas comunes a la hora de entregar los trabajos, casos especiales de estudiantes con problemas de electricidad, Internet y similares.
La unidad III es una de las más extensas, el interés principal en esta semana fue que el estudiante construyera conocimiento con ejemplos prácticos. Para lograrlo, en las sesiones sincrónicas se compartió el material didáctico indicado en la Tabla 3, preparado por el docente, el cual contiene ejemplos de mercadeo, imágenes y videos de empresas exitosas; asimismo, se abordaron las notas técnicas con situaciones de mercadeo ya resueltas.
Posteriormente, se crearon subgrupos aleatorios en Zoom. A cada equipo se les asignó un caso de mercadeo por resolver, desde la herramienta digital Padlet; al finalizar, los equipos socializaron sus apreciaciones y respuestas. Se aprovechó la conformación de las subsalas para aplicar, en 10 minutos, una estrategia didáctica de gamificación, empleando la herramienta Kahoot, con 12 preguntas teóricas sobre los temas ya vistos. El fin fue concientizar al estudiante sobre su nivel de conocimiento, de cara a la prueba parcial, apoyándose en un juego serio. Asimismo, se aprovechó las horas de consultas, para que los educandos repasaran, mediante un cuestionario, los temas vistos en clase; hubo un gran interés y participación en estas sesiones extraclase. Como se indica en la Tabla 4, se aplicó la prueba parcial I; es importante precisar que el examen se preparó desde la Cátedra de Negocios y se aplicó el mismo día, a la misma hora, en todas las sedes y recintos del país.
Ahora bien, como asignaciones asincrónicas, se confeccionó un material audiovisual desde la Cátedra de Negocios, en YouTube, con ejemplos prácticos y un paso a paso sobre cómo resolver casos de mercadeo; este se compartió en la plataforma de la universidad. Con el fin de reforzar todo lo anterior, se asignó, adicionalmente, un caso grupal de mercadeo para que los equipos resolvieran de modo asincrónico. Sobre este último, se generó un espacio de retroalimentación, desde la plataforma virtual de la universidad y en los espacios sincrónicos.
En este punto del curso, se reduce, en cierta forma, los niveles de incertidumbre sobre la virtualidad y ello permite al estudiantado concentrarse más en sus asignaciones y su aprendizaje. Asimismo, en todo momento, los participantes tienen la posibilidad de interactuar con el docente y sus compañeros, por medio del grupo WhatsApp o el correo institucional.
Ahora bien, el tema IV se caracteriza por ser más conceptual, así que, en las sesiones sincrónicas, se presentó al estudiante el material didáctico preparado por el docente, con los conceptos más importante del libro de texto, ilustrados con ejemplos, imágenes y palabras claves.
La actividad evaluativa de estas semanas consistió en la aplicación de la prueba corta II, referida a los contenidos ya abordados en las sesiones previas. Como actividades asincrónicas, el estudiantado debió resolver el caso asignado, por medio de la plataforma virtual de la universidad, y avanzar con sus trabajos finales.
Las semanas 10, 11 y 12, específicamente, se centraron en abordar el tema de contabilidad, caracterizado por ser muy práctico, por lo tanto, como se muestra en la Tabla 5, se usaron ejemplos o supuestos para desarrollarlos en clase. Asimismo, la Cátedra de Negocios facilitó una serie de videos de YouTube, con más ejemplos para que el estudiante reforzara su aprendizaje.
Las demás actividades se enfocaron en avanzar con la idea de negocio conducida a la Feria de Generación E, por lo que, en los espacios sincrónicos, se habilitaban salas para que los equipos de trabajo pudieran interactuar y progresar con su asignación. Finalmente, se estableció el último estudio de caso referido al tema de contabilidad. Las siguientes semanas se efectuó una serie de evaluaciones, como se indica en la Tabla 1.
Es importante precisar que la gran transformación en las prácticas académicas radica en que la metodología pasó a ser 100 % virtual. El docente debió diseñar, previamente, el material didáctico para su clase sincrónica; adicionar elementos pedagógicos asincrónicos que le permitieran abordar los objetivos y compartirlos con el estudiantado, por medio de una estrategia didáctica; al mismo tiempo, apoyarse en herramientas digitales no tradicionales como Zoom, MURAL, DRIVE, YouTube, Padlet, Kahoot, plataformas virtuales, WhatsApp y similares.
Valoración de los resultados
Desde mi punto de vista como docente, puedo afirmar que la nueva realidad mundial provocada por la pandemia del COVID-19 generó un ambiente de incertidumbre, preocupación y ansiedad que recae en el proceso académico. Solo la primera semana de clases se pudo tener contacto con el estudiantado del curso Introducción a la Administración de Negocios y, desde ese momento hasta la fecha de esta sistematización, todo el ciclo lectivo se ha impartido por medio de las herramientas digitales, lo cual ha desembocado en un constante proceso de aprendizaje. En el camino, surgieron muchísimas dudas sobre cómo abordar un curso que requiere un alto grado de acompañamiento, cómo dar seguimiento a los estudiantes y cuáles son las prácticas más adecuadas para afrontar un escenario totalmente nuevo, esas que se fueron solventando en la experiencia misma y con alto grado de acompañamiento por parte de la Cátedra de Negocios.
Por supuesto, todas las circunstancias también las vivenció el alumnado, principalmente porque la mayoría se enfrentó, por primera vez, al sistema universitario y, en muchas ocasiones, expresaba su temor, ansiedad e incertidumbre. La Tabla 6 resume una serie de apreciaciones de los participantes del curso, que se obtuvieron a partir de un diagnóstico aplicado.
Un aspecto relevante es que la mayoría de los estudiantes proviene de zonas rurales, por lo que es típico que tengan problemas de conexión (Internet) y, en el peor de los casos, no cuenten con equipo tecnológico. En una encuesta realizada, en el curso, a solicitud de la Coordinación de Carrera de Contaduría Pública, se detectó que un 23 % de los participantes tuvo algún problema en esta línea. Gracias al apoyo de la dirección del Recinto de Guápiles, se buscaron soluciones, como préstamos de equipos, computadoras o tabletas.
Ahora bien, como parte de la valoración del curso, en la figura 1, se puede apreciar que, en promedio, el 85 % del estudiantado aprueba el curso. Es importante precisar que una de las razones por las cuales no se alcanza una nota aprobatoria total es el abandono del ciclo académico por parte del estudiante.
La Universidad de Costa Rica no es una institución que ofrezca un servicio de educación superior virtual, pero, con el fin de asegurar la continuidad académica, propició los escenarios tecnológicos y didácticos para que los participantes (docentes y estudiantes) continuaran su proceso formativo. Las prácticas académicas detalladas en esta sistematización han sido un apoyo crucial para afrontar la pandemia y, en esta valoración, se puede apreciar que los cambios en ellas han permitido:
- Construir conocimiento en conjunto con el estudiantado.
- Generar espacios de discusión entre los estudiantes y el docente.
- Propiciar trabajo colaborativo entre pares, lo cual permite una interacción más natural.
- Fomentar el uso de herramientas digitales.
- Dar seguimiento a los avances individuales y grupales.
- Cumplir al 100 % un programa de curso que históricamente se ha realizado de manera presencial.
- Participar en una feria de negocios que por muchos años se ha ejecutado de manera física.
Reflexiones y conclusiones
Una vez finalizada la experiencia académica del curso y esta sistematización, se puede afirmar lo siguiente.
Los espacios dinámicos e interactivos en las aulas universitarias crean un ambiente flexible para la construcción del conocimiento. Conocer el contexto del estudiantado y facilitar prácticas académicas adecuadas para abordar un tema debe ser una regla de oro en la formulación de los cursos. Estamos acostumbrados a las clases magistrales, pero el contexto mundial nos obliga a todos los docentes a modernizar la estructura de nuestras aulas físicas o virtuales en función del estudiante, por lo tanto, la educación superior bajo el modelo híbrido es una realidad que las universidades deben valorar en su estructura orgánica, es hora de repensar el sistema educativo de las instituciones.
Ahora bien, las prácticas académicas descritas en esta sistematización se articularon con los objetivos temáticos, para garantizar la generación del conocimiento. No es un proceso al azar o de ocurrencia, consiste, más bien, en uno planificado. De esta sistematización, se desprenden estrategias didácticas, herramientas digitales, actividades ejecutadas y similares, que se diseñaron y estructuraron antes de llegar al aula, se espera perfeccionarlas con el paso de los semestres y se recomienda emplearlas en cursos con naturaleza similar; entre ellas se cuentan Zoom, MURAL, DRIVE, YouTube, Padlet, Kahoot, plataformas virtuales, WhatsApp, combinadas con trabajo colaborativo, aula invertida, aplicación de casos de estudio y demás semejantes. Asimismo, se armonizan prácticas académicas que van de lo conceptual, procedimental hasta lo actitudinal, lo cual requiere un alto grado de acompañamiento.
En nuestro caso, el apoyo de la Cátedra de Negocios fue transcendental para garantizar la continuidad del curso, por lo tanto, concluyo que la colaboración de otros docentes y pares, en el diseño de las prácticas académicas, es sumamente provechoso.
Por otra parte, pese al contexto, el aprendizaje no se puede detener, debe continuar, así que, en muchas ocasiones, el docente debe valerse de su experiencia para construir o reconstruir los escenarios didácticos que garanticen esa continuidad. Asimismo, la autoevaluación o autocrítica juega un papel fundamental. Gracias a todos los participantes, los cursos se lograron finalizar y el involucramiento en la actividad académica final se concluyó con éxito.
Por último, se recomienda concientizar al estudiante de su papel en el proceso de aprendizaje, como autor y responsable de su destino profesional. Es imprescindible integrar tópicos o espacios humanísticos que nos recuerden que, al final del día, todos estamos atravesando una nueva realidad y que el éxito de un curso o de una práctica académica depende de los actores participantes del proceso formativo, tanto el docente como el estudiante
Resumen
Descripción:
Objetivo:
Metodología:
Resultados:
Conclusiones:
Main Text
Introducción
Antecedentes
Contexto general
Contexto específico
Marco teórico
Metodología
Punto de partida
Perfil del estudiante
Objetivo del curso
Plan de sistematización de la experiencia
Objetivo de la experiencia
Delimitación
Eje central de la experiencia
La experiencia en sí: reconstrucción de la historia
Secuencia didáctica
Valoración de los resultados
Reflexiones y conclusiones