[pp.25-39]
ISSN: 1405-0234 • Revista Nuevo Humanismo
Vol. 4(1), Enero - Junio, 2016
http://dx.doi.org/10.15359/rnh.4-1.2
Influencia intercultural del baile folclórico en las personas adultas mayores del grupo “Alma Joven”
Intercultural Influence of Folk Dance in Older People From “Alma Joven” Group
Maribel León Fernández
Universidad Nacional,
Costa Rica
maribel.leon.fernandez@una.cr
Ismael Corrales Camacho
Universidad Nacional,
Costa Rica
ismael.corrales.camacho@una.cr
Resumen
La interculturalidad es un componente de gran importancia en cualquier grupo social, pues permite crear un ambiente de respeto y tolerancia entre miembros de distintas nacionalidades. Es un término tan amplio que comprende una gran variedad de costumbres autóctonas de distintas regiones del planeta, las cuales pueden ser aprendidas por otras culturas si se dejan cautivar por el aprendizaje de experiencias totalmente nuevas y desconocidas hasta el momento. El grupo de baile folclórico “Alma Joven” no fue la excepción; se convirtió en un grupo intercultural por haber ido integrando, poco a poco, coreografías pertenecientes a distintos países, gracias a la contribución de compañeras de diferentes nacionalidades, quienes se fueron integrando al curso artístico, sin temor a ser discriminadas por sus pares costarricenses.
Palabras clave: Educación, arte, folclore, interculturalidad, persona adulta mayor.
Abstract
Interculturality is a very important component of any social group, because it creates an environment of respect and tolerance between members from different nationalities. It is so wide term that covers a great variety of indigenous customs from different regions of the world. Other cultures can learn different customs if these captivate them when learning totally new and unknown experiences so far. The folk dance group “Alma Joven” was not the exception. It became an intercultural group when it was integrating, little by little, choreographies from different countries, thanks to the contribution of partners from several nationalities, as they were joining the artistic course without fear of being discriminated by their Costa Rican peers.
Keywords: Education, art, folk, interculturality, older adult.
1. Introducción
La vejez y el envejecimiento activo son temas que actualmente corren a lo largo y ancho del globo, pues mucho de ello se le atribuye a la información que se ha expuesto por gran cantidad de estudios en gerontología que hacen un llamado a la comunidad mundial sobre la importancia de envejecer activamente para que haya una mejor calidad de vida cuando mayores.
A raíz de esta situación, una amplia gama de instituciones ha creado proyectos y programas enfocados en el mejoramiento de las condiciones de salud física y emocional de las personas adultas mayores para evitar los deterioros que usualmente se presentan en la edad avanzada a causa de la desinformación.
Algunos de estos logros se presentan como cursos o talleres que las personas adultas mayores pueden tomar con el objeto de que realicen actividades que les permitan mantenerse ocupadas y no tiendan a caer en un total sedentarismo que luego podría desatarse en una serie de consecuencias para su vida.
La educación en personas adultas mayores nos puede llevar hasta el área del arte y la cultura, que representan una manera magnífica de recrearse y de aprender algo nuevo. Al mismo tiempo que las personas son instruidas, se puede ver reflejado el hecho de que socializan y comparten afectivamente sus sentimientos, lo que claramente señala que las personas de edad avanzada quedan expuestas a una constante actividad física y a una necesaria coordinación mental, las cuales son fundamentales para su salud integral.
Con respecto a la interculturalidad, se abre un mundo de posibilidades donde las personas adultas mayores aprenden algo totalmente nuevo para ellas, en el caso del baile folclórico adquieren las técnicas de baile y movimientos que no son propios de su país de origen, haciendo que deban esforzarse el doble por conseguir dominarlo, para el estudiantado extranjero sucede lo mismo, pero cuando se le da la oportunidad de presentar un baile de su país de origen la experiencia socialmente se vuelve emotiva y, por otro lado, es una forma de compartir lo poquito de lo mucho que saben de su país, donde el respeto y tolerancia son la clave del éxito para un grupo intercultural.
2. Importancia de la educación en la PAM
El proceso educativo en una persona adulta mayor requiere de un factor muy importante y este es la paciencia, sin esta característica quien educa se encontraría con una serie de problemas que afectaría el desarrollo natural de una clase conformada por un grupo variado de personas adultas mayores. Se debe tener claro que no todas las personas de edad avanzada coinciden en personalidades y necesidades, cada persona como ser individual posee distintas capacidades que la hacen única en la ejecución de su talento. Al mismo tiempo, su forma de ser influye mucho en el aprendizaje y esto hace que un educador o educadora deba adaptar su lección para que todo el grupo comprenda el tema o técnica que se le está enseñando.
A diferencia de una población joven, la adulta mayor requiere de una metodología más paulatina que permita asimilar, de manera sólida, muchos conceptos que deben aprender. Por lo que aplicar solamente una clase magistral o conductista ocasionaría un posible incumplimiento de objetivos educativos que quizás su docente quería llevar a cabo con su grupo de estudiantes. Se ha dicho popularmente que no existe límite de edad para quien desea estudiar o continuar con sus estudios, ampliar los conocimientos que se agregarán al currículum es un derecho de todos los seres humanos y, por supuesto, las personas adultas mayores no son la excepción a la regla.
Existe un estudio que puede reforzar lo anterior y que demuestra las diferencias conductuales entre la población joven y la población adulta mayor cuando se trata de tomar ciertas decisiones. Dicha explicación aparece en uno de los párrafos de un artículo presentado en El Economista sobre el referéndum que se dio en Reino Unido, el texto puntualmente expone lo siguiente:
Las decisiones de los adultos mayores mostraron menos sesgos que las de los jóvenes; sin embargo, también se encontró que las personas mayores tienden a mostrar posiciones más absolutas respecto de los temas: ya sea manifestando una completa certidumbre de su postura o por el contrario de absoluta inseguridad al respecto. Ello implica que son capaces de reconocer que no saben de un tema, pero de aquel que creen saber, manifiestan una absoluta certeza. Por ello encontramos que a muchas personas mayores les cuesta mucho trabajo cambiar de opinión una vez que han asumido una postura que consideran valida al respecto. (2016)
Actualmente, la educación se ha ampliado a todos los campos y las edades, usualmente era común escuchar el término ‘pedagogía’ en los ámbitos educativos para la niñez, adolescencia y personas adultas jóvenes; sin embargo, la ‘andragogía’, por su parte, se ha establecido como una de las especializaciones más importantes en el área de la educación, ya que brinda las estrategias necesarias para capacitar a personal educativo en la enseñanza de personas adultas y personas adultas mayores (algunos prefieren para este grupo poblacional la gerontología), ya que la manera de educar a un niño no es la misma que se debería utilizar para hacerlo con personas adultas mayores. La inclusión de la población adulta mayor en cursos y talleres de carácter formal e informal aumenta con el pasar de los años y a medida que la sociedad se vuelve letrada y preparada profesionalmente, hace que muchas personas de edad avanzada pensionadas prefieran tomar cursos académicos o paraacadémicos que les hagan aventurarse en la adquisición de nuevos conocimientos.
La educación, al ser un derecho universal, debe estar abierta en cuanto a oportunidades de aprendizaje para todos los individuos que deseen incluirse en algo tan valioso como lo es la adquisición de conocimientos en cualquier área de interés; además, tienen derecho a un trato justo y equitativo donde no se discrimine a ninguna de las personas por sus condiciones relacionadas a aspectos socioeconómicos, género, orientación sexual, capacidades diferenciadas y, por supuesto, edad. Se debe ver la educación como un espacio no solamente de aprendizaje de nuevos conocimientos, sino también de socialización, pues muchas personas dependen de lazos afectivos que construyen con sus compañeros y compañeras; tal hecho es afirmado por Teresa Aracelis García Simón que indica lo siguiente en su artículo llamado “La educación del adulto mayor: Antecedentes y perspectivas”:
El derecho a la educación no debe ser sometido a ningún límite de edad y para el adulto mayor este derecho tiene una significación especial, pues representa una oportunidad de actualización, participación social y reafirmación de sus potencialidades. Para las personas que transitan por esta etapa de la vida, la educación puede contribuir al desarrollo de una cultura del envejecimiento y elevación de la calidad de vida expresada en mayores estándares de salud, felicidad y bienestar. La educación del adulto mayor tiene sus antecedentes en la formación de adultos, a la que múltiples autores han intentado conceptualizar como una ciencia, con una historia y desarrollo propio. (2007)
Con lo anterior, la autora señala un punto fundamental con respecto al tema de una cultura de envejecimiento, ya que mejora las condiciones emocionales y físicas de las personas adultas mayores. El acceso a la educación para una persona adulta mayor es sinónimo de un gran bienestar, debido a que está expuesta a un mejoramiento personal y profesional, lo que se traduce, tal y como lo indica el texto anterior, en un bienestar que proporciona una gran felicidad en esta respetable población. Al mismo tiempo, cabe indicar que la persona adulta mayor refuerza aquellos conocimientos que haya adquirido tiempo atrás, mediante actualizaciones profesionales que pueda recibir de una institución de su preferencia y que le permita avanzar en su campo. Muchas son las personas mayores que prefieren estar asistiendo a clases para permanecer ocupadas física e intelectualmente que permanecer en sus hogares donde les podría esperar quizás una vida muy sedentaria, si se dejan envolver por los “merecidos descansos”, de los cuales se escucha hablar mucho cuando una persona de edad avanzada tiende a jubilarse.
3. La educación artístico-cultural en la PAM
El arte y la cultura son dos conceptos que prácticamente llegan a acompañar la vida de una persona a lo largo de su existencia, ya que ambas concepciones están estrechamente relacionadas y se manifiestan de manera conjunta, especialmente cuando el arte hace su aparición en muchos de los espacios en los que nos establecemos. Entre las expresiones artísticas que podríamos asociar fuertemente con la cultura podríamos encontrar el baile, la música, la pintura, la literatura, la moda y las comidas, entre otras. La cultura acoge muy bien cada una de estas manifestaciones, ya que son parte de la identidad nacional de cada pueblo, un ejemplo exacto de cultura, ya que esta aborda aquellas costumbres y tradiciones propias de una región geográfica determinada. Cuando un grupo de personas es instruido sobre el arte y la cultura del país al que pertenecen, este acto se convierte en un momento sumamente educativo, ya que culturalmente existirá una acumulación de riqueza autóctona y, al mismo tiempo, se dará el aprendizaje de una nueva técnica o especialización que acompaña la identidad nacional.
Entonces, para comprender lo que es cultura, arte y expresión artística se debe definir cada una de ellas. Según el Diccionario de la Real Academia Española (RAE, s.f.) se tiene que la cultura es el conjunto de modos de vida y costumbres, conocimientos y grado de desarrollo artístico, científico, industrial, en una época, grupo social, etc. Asimismo, la RAE (s.f.) define el arte como la manifestación de la actividad humana mediante la cual se interpreta lo real o se plasma lo imaginado con recursos plásticos, lingüísticos o sonoros. Además, Goyena (2009) establece que la expresión artística es la canalización de ideas y sensaciones intelectuales hacia el exterior y hacia los demás individuos mediante una disciplina artística.
Con respecto a la educación artístico-cultural en las personas adultas mayores, se podría indicar que esta población, en la mayoría de los casos, es sumamente apegada a sus raíces y tradiciones, lo que hace que el concepto cultural se vea mayormente reflejado en ellas, ya que se sienten orgullosas del país que los vio nacer y al mismo tiempo se sienten identificadas con las efemérides y actividades tradicionales de sus pueblos. Por lo tanto, el tema cultural se destaca muy bien en las personas de edad avanzada y se podría decir que no existe ningún riesgo de que se vaya a extinguir esta sentido de pertenencia, así que tampoco será tan necesario educar sobre cultura nacional, pues son más bien las personas de este grupo de población quienes terminan enseñando sobre este aspecto a las personas más jóvenes de la nación. Si se quiere apuntar al componente artístico, se debe estimar que esto tiene otra connotación, debido a que en muchos de los casos este aspecto debe ser enseñado, a menos que la persona de edad avanzada descubra que tiene un talento innato que le permite crear o ejecutar técnicas artísticas de las cuales nunca antes había formado parte.
Ambos términos se conjugan de manera perfecta cuando se trata de la educación para personas adultas mayores, ya que esta población descubre una pasión en lo que realiza, pues demuestra a sus semejantes lo que puede hacer con sus aprendizajes y, al mismo tiempo, comprueba que está aferrada a las tradiciones y creencias de su pueblo, lo que hace que se mantenga viva la memoria de un país. Otros de los beneficios ganados a través de la educación artístico-cultural en las personas adultas mayores es el mejoramiento de las capacidades cognitivas, el control de la motricidad fina y gruesa, y la aparición de la estimulación creativa como modo de expresión humana. Las cualidades anteriores parecen muy comunes en todos los seres humanos, ya que se aprenden desde el nacimiento, pero lo cierto es que a una edad avanzada se exponen a un deterioro por múltiples factores de salud que, si no son tratados a tiempo, pueden empeorar al punto de perderse por completo.
Lo anterior, con respecto a la importancia del arte, puede ser reforzado con la siguiente cita de E. W. Eisner en su trabajo El arte y la creación de la mente (2004) que dice así:
El trabajo en las artes no solo es una manera de crear actuaciones y productos; es una manera de crear nuestras vidas ampliando nuestra conciencia, conformando nuestras actitudes, satisfaciendo nuestra búsqueda de significado, estableciendo contacto con los demás y compartiendo una cultura. (p. 19)
Como indica la anterior cita, el arte puede ser un medio para crear nuestras vidas, donde la ampliación del conocimiento y el contacto social para compartir una cultura son la clave exitosa de la autorrealización como personas y el mejoramiento de nuestras capacidades. Con esto se genera un bienestar inmensurable en la persona adulta mayor que está aprovechando los servicios artísticos y culturales de una institución encargada de brindarlos, lo cual, indiscutiblemente, se llega a convertir en un tesoro patrimonial para una nación, pues como se ha indicado con anterioridad, estas personas almacenan valiosa información cultural necesaria de transmitir a las más jóvenes generaciones con quienes se contacten en el disfrute del arte como medio de expresión cultural, de igual manera constituye un aprovechamiento del tiempo libre con que cuentan, debido al cese de sus funciones laborales y que hoy les da otra oportunidad de crecer.
4. Interculturalidad en un grupo de PAM
Al hablar del término interculturalidad, lo primero que se puede pensar es en la mezcla de una serie de tradiciones extranjeras en una cultura nacional. En realidad, la idea involucra mucho más que eso, pues se debe valorar el impacto social que esta integración llega a tener en un grupo humano determinado; especialmente si se le ha otorgado la oportunidad a un conjunto de personas de estar expuestas a las costumbres de otra cultura que ha decidido compartir abiertamente estos rasgos autóctonos de los cuales se sienten orgullosas.
La situación se torna aún más interesante en un grupo de personas adultas mayores que por su edad y educación han desarrollado un nacionalismo muy marcado por el profundo amor que sienten hacia su tierra, lo cual hará que compartir su cultura con otras personas no pertenecientes a sus raíces sea una tarea sumamente amena, al mismo tiempo que se muestra la competencia que tienen sus costumbres en cualquier rincón del mundo.
La interculturalidad es definida en el anteproyecto de ley panameña titulado “Que establece la protección integral de los derechos de las personas Adultas Mayores en Panamá y dicta otras disposiciones” de la siguiente forma:
Proceso de comunicación e interacción entre personas y grupos con identidades culturales específicas, donde no se permite que las ideas y acciones de una persona o grupo cultural esté por encima del otro, favoreciendo en todo momento el diálogo, la concertación y con ello, la integración y convivencia enriquecida entre culturas. Las relaciones interculturales se basan en el respeto a la diversidad y el enriquecimiento mutuo. (2015, p. 10)
Este fragmento prueba que la interculturalidad está basada en el respeto a la diversidad cultural, se pretende crear con ella una equidad donde dos o más culturas puedan convivir de manera pacífica y aprendan una de la otra. Además, la interculturalidad se basa en la interacción que permite un acercamiento entre las culturas, lo cual hace que un país crezca de manera pluricultural, ya que se irá formando a partir de los intercambios culturales que tarde o temprano ocasionarán un mestizaje cultural que, desde la perspectiva social, tiene grandes beneficios para un país (CIDEHUM, 2011). El término debe crear vínculos de respeto entre las personas nacionales y extranjeras que permitan una sana convivencia. En ocasiones, la intolerancia a la diversidad cultural se puede complicar un poco con las personas adultas mayores, debido a los prejuicios sociales con los que han crecido en relación con otras culturas; además, los relatos y los chistes se suman muchas veces a estos problemas de discriminación, ya que obviamente se está formando una serie de estereotipos que terminan por sesgar la verdadera reputación de una cultura extranjera.
Si los mitos y estereotipos sobre otras culturas llegan a ser destruidos, es indudable que las personas adultas mayores disfruten y compartan felizmente entre sí, sin importar sus orígenes, ya que al fin y al cabo lo importante es compartir como personas de la buena compañía. El incluirse e integrarse en grupos culturales variados hace que la mente de la persona de edad avanzada sea más elástica para comprender socialmente que en realidad no existen diferencias abismales que perjudiquen la convivencia sino, más bien, complementan al grupo; además, se da la oportunidad de aprender nuevas costumbres y tradiciones que se desconocían.
5. El aprendizaje y valoración del folclore como herramienta de empoderamiento, identidad y pertenencia
Este apartado pretenderá narrar las experiencias y vivencias que cada una de las señoras extranjeras integrantes del grupo de baile folclórico “Alma Joven” logró adquirir durante el tiempo que han estado dentro del grupo artístico. Lo primero que se debe indicar es que “Alma Joven” comenzó a integrar las danzas folclóricas internacionales en el momento que llegó la primera estudiante extranjera al grupo, es decir, exactamente el mismo día que inició la clase inaugural. Lo que se traduce en que el grupo incluyó el componente intercultural desde que inició su primer ensayo, esto nos hace ver que el grupo no solamente se interesó por el baile folclórico costarricense, sino también por otros bailes folclóricos internacionales para darle un espacio de orgullo nacional a las compañeras extranjeras que se incorporaban al grupo.
De esta manera, se emprende un viaje con el deseo de potenciar no solo las habilidades artísticas de las estudiantes, sino también para fortalecer el sentido de pertenencia de las señoras extranjeras y ampliar los horizontes culturales de las costarricenses. Dentro de las nacionalidades que se tienen o han tenido en el grupo están la colombiana, panameña, ecuatoriana, cubana y la salvadoreña (esta última que cumplió un papel muy específico, pues hasta el momento no se ha tenido a ninguna estudiante de El Salvador, pero, como se explicará más adelante, fue incorporado este país por una situación especial).
“Alma Joven” ha crecido como un grupo intercultural que plasma el valor nacional e internacional en todas las presentaciones a donde vaya dentro del país; además, el grupo ha hecho apariciones en lugares públicos y privados, en municipalidades, en actividades de peso cultural como “Enamórate de tu ciudad” promovido por el Ministerio de Cultura y Juventud y tuvo la oportunidad de salir en el programa “Con sello de oro” del canal 13. En todas estas presentaciones se ha mostrado con las coreografías nacionales e internacionales, lo que ha causado un impacto intercultural a gran escala, pues demuestra que las personas adultas mayores saben respetar y aprender de otras culturas.
Para cada país se asignó una canción, por ejemplo, para Colombia se tiene “La pollera colorá”, para Panamá se presenta “El tambor de la alegría”, para Ecuador se baila “Chola cuencana”, para Cuba se designó “El son de la loma” y en un acto muy especial que fue para apoyar a una estudiante de El Salvador que se graduaba de la carrera de música en la Universidad Nacional de Costa Rica se bailaron dos canciones que fueron “Chalatenango” y “Las cortadoras”, ambas bailadas por estudiantes nacionales y extranjeras sin necesidad de haber tenido en el grupo a una compañera salvadoreña; sin embargo, se espera que en el futuro una pueda integrar el grupo para que pueda hacer suya una o ambas coreografías.
Cabe comentar la historia de las estudiantes de Colombia, Ecuador y Panamá, las dos primeras viajaron a sus países de origen para comprar un traje típico de su país y poderlo utilizar en las presentaciones que hagan con el grupo, mientras la última estudiante conservaba un traje que fue herencia de su abuela y de su madre que también lo llegó a utilizar en todos los actos a los que asistió con nosotros, hasta que un día tuvo que regresarse a Panamá, dejándonos un legado cultural para seguir compartiendo con las demás personas.
Todo lo anterior demuestra el espíritu de pertenencia que se puede llegar a desarrollar en un grupo artístico con miras a la promoción cultural donde la tolerancia, el respeto y el afecto están siempre presentes. El caso de “Alma Joven” es muy especial, en el sentido de que nunca se ha presentado ningún tipo de discriminación ni de malos gestos por el hecho de que una compañera sea de otra nacionalidad, al contrario de esa actitud, se recibe con los brazos abiertos y se trata de que se sienta cómoda en el grupo, a tal extremo que se le insta a hablar de su música folclórica con el objetivo de que elija una para que junto con su facilitador puedan elaborar la coreografía hasta que estén totalmente de acuerdo con todos los detalles y de esta manera se sienta identificada con su pieza musical a la hora de presentar la coreografía de su pueblo.
6. Aprendizajes interculturales en un grupo de baile folclórico de PAM
Para esta sección, debemos enfocarnos profundamente en el legado que pueda dejar un grupo intercultural a otras personas adultas mayores que quieran aprender del baile folclórico internacional. El baile es una forma de expresión artística que no tiene límites, ya sea que se utilicen canciones naciones o internacionales, siempre habrá un motivo que haga a las personas adultas mayores lucirse en un escenario. El caso de “Alma Joven” es un ejemplo vivo y claro de cómo se puede aprender algo del exterior sin haber salido de las fronteras nacionales y de cómo puede haber una continuación de la interculturalidad, si uno de los miembros del grupo se ha retirado.
Además de lo que se siente una persona de edad avanzada cuando baila una canción propia de su pueblo, el baile hace que sus ojos se iluminen y que su corazón se llene de regocijo, al punto que es imposible no poder dejar de entonar la letra cuando se está haciendo una presentación. Para la persona adulta mayor extranjera, es una experiencia inolvidable y se disfruta más de dicha alegría, si al lado se tienen compañeras que también disfrutan de bailar la canción que corresponde a otra cultura ajena a la suya, pero que al mismo tiempo están haciendo que llegue a formar parte de ella.
Un grupo de baile folclórico que se armonice con personas de otras culturas en sus presentaciones es un grupo que muestra fuertes lazos de hermandad y que no hace distinción en absoluto en la etnicidad de los demás. Simplemente están para compartir y hacer sentir especiales a los demás, es un grupo que tiene un compromiso social dentro y fuera, ya que no se alimenta de apariencias, sino que demuestra que la convivencia grupal entre culturas diversas es posible y no cuesta nada. Con esto, las personas adultas mayores enseñan a todas las generaciones que la xenofobia no es una vía por la cual la humanidad podría prosperar, sino que más bien llevaría a la raza humana a una destrucción a causa de la intolerancia cultural que muchos apoyan con la idea de que son mejores que los demás y no empiezan por ver sus propios defectos para así tratar de erradicarlos y enfocarse en el desarrollo de más virtudes personales.
7. Consideraciones finales
La formación en el tema del arte y la cultura permite a las personas adultas mayores poderse expresar ante un grupo de personas que esté dispuesto a sentir el mensaje que transmiten. Muchas veces los mensajes no requieren de palabras, sino que necesitan de movimientos y expresiones faciales que reflejen los pensamientos más profundos de las personas adultas mayores, quienes no dudarán en externarlas en alguna presentación que hagan para el grupo al que pertenecen, al mismo tiempo que afloran sensaciones que difícilmente alguna persona del público podría sentir, pero que tal vez sí pueda percibir desde donde se encuentra.
La interculturalidad es el medio por el cual se puede crear un contacto tolerante entre personas de distintas etnias, es también la forma por la cual muchas naciones pueden unirse en una sola, sin necesidad de buscar barreras o límites geográficos que les impidan convivir en armonía. Algunas personas adultas mayores tienen creencias sobre otras culturas que en ciertas ocasiones pueden afectar su relación con las demás, pero esto debe ser tratado de manera profesional enfrentando los mitos y estereotipos elaborados por la misma sociedad que busca empañar la imagen de una persona por simple generalización.
Las personas adultas mayores son individuos que valoran el arte y la cultura en todas sus expresiones y como todas las demás personas tienen derecho a ser incluidas en ella a través de la educación. Del mismo modo, tienen derecho a transmitir la cultura a través de sus conocimientos y ser respetadas en dicho proceso.
Los grupos de baile folclórico de personas adultas mayores son una oportunidad perfecta de crecimiento personal y de interacción social que permite a las personas de edad avanzada adquirir conocimientos, conservar su motora fina y gruesa, y estimularse cognitivamente a través del arte y la cultura.
Como último aspecto se puede reforzar lo dicho anteriormente con lo expresado por el gobierno de Colombia en el Informe final de adultos y adultas mayores (s. f.) que indica lo siguiente:
El desafío de las sociedades occidentales contemporáneas se centra en armonizar los requerimientos de la acumulación del capital, las exigencias emanadas de la representación política y de las demandas sociales, y la decreciente capacidad de la economía para satisfacerlas. La exclusión y la creciente desigualdad social que afecta al grueso de la población extienden sus efectos en la organización cultural de estas sociedades, expresados en el debilitamiento de los actores sociales, la apatía, la pérdida de espacios para la participación, entre otros. Es aquí donde se hace necesario que la democracia permita recobrar el rol de la ciudadanía que desplace la noción de consumidores, es decir se promueva la construcción de ciudadanías insertas en relaciones claras de producción. (p. 53)
Referencias
Asamblea Nacional de Panamá. (2015). Anteproyecto de ley ‘Que establece la protección integral de los derechos de las personas Adultas Mayores en Panamá y dicta otras disposiciones’. Recuperado de http://www.asamblea.gob.pa/sites/default/files/proyectos/2015_p_133.pdf
Centro Internacional de Derechos Humanos de la Persona Migrante. (2011). Migración e interculturalidad. Recuperado de http://www.fimi-iiwf.org/odmdg/material-complementario/13.CostaRica/Migracion_interculturalidad-Costa-Rica.pdf
Eisner, E. W. (2004). El arte y la creación de la mente: El papel de las artes visuales en la transformación de la conciencia. Barcelona: Paidós.
García-Simón, T. A. (2007). La educación del adulto mayor: Antecedentes y perspectivas. Recuperado de http://psicopediahoy.com/educacion-adulto-mayor/
Goyena. (2009). La importancia de la expresión artística. Recuperado de http://www.bebesymas.com/desarrollo/la-importancia-de-la-expresion-artistica
Informe Final de Adultos y Adultas Mayores. (s. f.). Formulación y/o fortalecimiento de las políticas y la construcción de planes sectoriales para los campos del arte, la cultura y el patrimonio para las poblaciones de adulto mayor, mujer, ruralidad con la población infantil en el distrito capital, en el marco del plan de desarrollo. Recuperado de http://www.culturarecreacionydeporte.gov.co/sites/default/files/biblioteca-digital/formulacion_de_las_politicas_y_.adultas_y_adultos_mayores.pdf
Martínez Solares, R. (2016). Diferencias en la conducta entre los jóvenes y los adultos mayores. Recuperado de http://eleconomista.com.mx/finanzas-personales/2016/06/28/diferencias-conducta-entre-jovenes-adultos-mayores
Real Academia Española. (s.f.). Diccionario de la lengua española (Edición del Tricentenario). Recuperado de http://dle.rae.es/