R E P E R T O R I O


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A M E R I C A N O


Segunda nueva época N.° 33, Enero-Diciembre, 2023

ISSN: 0252-8479 / EISSN: 2215-6143



Cuento, poemas y canción

José María Quesada Matarrita


Tésgo, el ser primigenio

Prólogo

El simple hecho de hablar de vida suscita en el individuo una semilla de curiosidad sobre sí mismo y aquello que lo rodea; porque la vida es algo cotidiano, más complejo a la vez. Quien no se pregunte sobre la vida desconoce cuál es su significado en el mundo, ya sea como individuo, comunidad, sociedad, animal, especie o ser en este vasto e interminable cúmulo de energía que solemos denominar universo, sol, Tierra, o aún peor, valorizarlo con sinsentidos. Sea cual sea tu caso, mi preciado lector, es tu deber cuidar y valorar aquello de lo que dependes y por lo que existes, en lugar de dañarlo y destruirlo cada vez más aceleradamente. No obstante, esta frase es universal. El ser humano es un ser complejo y contradictorio, pero no por ello debemos creer que es el más importante; por darte un ejemplo, todo ser humano es esclavo de lo que adjudica valor; sin embargo, ser esclavo es insuficiente para que él esclavice a otros, y no solo a humanos, sino lo que le rodea.

Tú eres igual a mí, yo soy igual a ti, pero mantenemos barreras y diferencias. Hay contradicción, pero es una característica del ser humano. El humano omite tópicos importantes y relacionados directamente con él porque desconoce el lúgubre y despiadado destino que le aguarda, aunque otros, aun sabiéndolo, aceptan este desenlace como parte de su destino y ajeno a sus decisiones. El futuro depende de ti, tú dependes del futuro, lo que suelo denominar como ‘yo’ depende de ti. No te pido que cambies el mundo, te pido que cambies tu forma de verlo; quizás una perspectiva distorsionada de la realidad y tu papel en la existencia. La vida es invaluable; aunque siga siendo incomprendida por ti, debes protegerla por todos los medios. Al escribir “Tésgo, el ser primigenio” busco una reflexión profunda sobre tus acciones en este mundo, añadiendo mi estilo y creatividad a la obra para que trates de entender el subtexto y el significado de los significantes que utilizo para regalarte el conocimiento más preciado que conozco.

13 de mayo de 2023

Capítulo I

Génesis

Él es génesis, el alfa y el omega, el inicio y el fin, pero no el contragénesis de su creación. Él fue la chispa primordial para la creación, donde hoy todo existe y sigue un delicado equilibrio en su vasto vacío, él es el sentido de orden. La realidad la moldeó a su placer, agregando todo tipo de maravillas cósmicas en el vasto y cuasi interminable universo: estrellas, galaxias, planetas de infinitas posibilidades y únicos en toda la existencia. Entre ellos, en la inmensidad del tiempo y el espacio apareció un planeta con las condiciones que Tésgo deseaba para proliferar vida, diferente al resto del inerte universo; la vida buscará mantener su estado efímero y volátil en el universo desafiándose a sí misma. A Tésgo le pareció interesante dejar aquello que había llamado vida y luchar por su lugar en el vasto espacio y tiempo, y este exclamó:

Tú que desafías a la existencia misma, aquello que se niega a perecer, te permitiré batallar contra todos los retos que te aguardan; solo seré un mero vigilante, ni juez, ni jurado, ni verdugo.

Así, la vida empezó a esparcirse por todo aquel planeta, en cada rincón oscuro, agua congelada o hirviendo, en las grandes montañas o en los profundos océanos; la vida siempre encuentra la manera de abrirse paso por la existencia. La vida tomó diversas y variadas formas, cada una única e irrepetible, cada una de ellas acabaría por destruirse algún día. Él creó la existencia y de entre toda la existencia surgió la humanidad en aquel planeta repleto de vida; un animal muy peculiar al cual le dio libre albedrío para usar a placer todo lo que la existencia puso a su disposición.

Así, la humanidad probó el amargo sabor del placer de la codicia, y de la envidia, y de la gula, y de la soberbia, y de la ira, y de la lujuria, y de la pereza; cada uno igual que el otro priva a la vida de significado, y sin significado no hay valor en ello. El tiempo no se detiene, la humanidad tampoco; cada pecado lleva al odio, del odio surge el sufrimiento, del sufrimiento el dolor, del dolor la venganza, y de la venganza surge más odio. Así la humanidad se sumergió en una cadena interminable de odio que ha perdurado a través de los siglos, guerra tras guerra sin parar hasta nuestro presente. Los humanos se unieron entre ellos y crearon pueblos; los pueblos, ciudades; las ciudades, lenguajes y culturas; los lenguajes y culturas, sociedades; las sociedades, civilizaciones. Cada vez que la humanidad avanzaba un paso más, se aislaba aún más de los otros humanos levantando muros imaginarios e identidades que proteger.

Esto provocó que hermanos lucharan contra hermanos, padres contra hijos, pueblo contra pueblo, cada vez más meticulosamente planeado y ejecutado solo por más tierras que cultivar, suelos que excavar, dinero para gastar; arrebatar de las manos todo aquello que el otro valora y necesita solo por egoísmo y falta de empatía. Pero Tésgo nunca interferiría en los asuntos de la humanidad; él solo es un observador de los acontecimientos; la presencia de todo lo que pasa, más todo lo que sucede es consecuencia del libre albedrío de la humanidad. Nunca imaginaríamos el dolor de Tésgo al ver a su creación distanciarse de sí misma.

Capítulo II

Progreso

Cuando los humanos se unieron entre ellos, estos se dividieron; solo hablar un lenguaje diferente ocasionaba malentendidos entre los humanos; pero incluso al hablar el mismo lenguaje y tener la misma cultura, los humanos seguían luchando entre ellos. Entre los humanos aparecieron personas fuertes que dirigían a sus hermanos, personas que buscaban mejorar la vida de sus hermanos, personas que prestaban su fuerza a sus hermanos; aquel capaz protegiendo al incapaz. Todos los humanos nacen iguales, pero solo al momento de nacer. Así, personas capaces decidieron ayudar a sus hermanos, otros humanos decidieron usar su fuerza para su beneficio.

Así como personas fuertes se alzaban, sociedades fuertes se alzaban; a través del tiempo y el espacio recibieron distintos nombres: jefes, reyes, dictadores, emperadores, presidentes, ministros; aquellos que gobiernan sobre sus iguales tomando las mejores decisiones. Aunque hubo líderes que buscaban el bien de su pueblo, otros deseaban satisfacer sus intereses personales aun si significaba llevar a sus gobernados a la ruina, muchas veces justificándolo como necesario para el desarrollo de su sociedad con libertad, pureza, supremacía o inferioridad. A los líderes nunca les preocupó ir a la guerra, pues ellos no estaban en la vanguardia, ellos estaban sentados desde lo alto dirigiendo a los jóvenes a su perdición:

¿Quién pensaría que le atribuirían a la muerte y a la guerra un significado de acto de valentía y honor, en lugar de cobardía y maldad? Dijo Tésgo avergonzado de su creación.

Aun así, el humano siempre fue un ser ingenioso crítico de sí mismo, sabía cuáles eran sus debilidades y siempre buscaba contrarrestarlas con tecnología; si el rival forjaba una espada más fuerte, él crearía una armadura capaz de resistir. Continuaron luchando hermanos contra hermanos, padres contra hijos, pueblo contra pueblo cada vez más meticulosamente planeado y ejecutado interminablemente; la guerra y el progreso nunca se detienen, mas quienes la sufren y la añoran son los que menos gozan de la paz y del progreso. La humanidad es avariciosa, pero ingeniosa. Se crearon nuevas formas de destruir cada vez más eficientes y devastadoras, perfeccionaron cada arte de la guerra para superar al rival hasta el punto de tener armas capaces de destruir todo lo conocido, y aún sin conocer, en un parpadear.

El humano no solo creaba armas, sino herramientas. Todas sus actividades manuales las mecanizó con la fuerza del agua, después utilizó la energía guardada por millones de años en la Tierra, sin saber que propiciaban su destrucción, extendiendo su consumo hacia alturas inimaginables. Cada vez necesitaba más energía y materiales, así que continúo explotando su alrededor hasta dejarlo seco, sin vida, para luego automatizar su industria y finalmente cederla a las máquinas que había creado; cada tarea posible llevada a su máximo potencial y rendimiento. Destruyó el mar, la tierra y el cielo por el progreso, a un costo inmedible. Tésgo se preguntó si sufrió más el hogar de la humanidad, o la propia humanidad sin ser consciente de sus actos porque cada vez que la humanidad avanzaba un paso, se aislaba aún más de los otros humanos y su hogar.

Capítulo III

Democracias

¡La grandeza de la humanidad es incomparable! Exclamó la serpiente vestida de traje y corbata.

Los perros que buscaban huesos, gatos pescados, conejos zanahorias, ovejas pasto, águilas peces, leones presas y osos miel asintieron todos por igual sin ninguna objeción ya que esperaban conseguir cada uno sus deseos. Al final, los osos nunca se empalagaron, los leones nunca acabaron de cazar, las águilas buscaron peces fuera de sus montañas, las ovejas fueron devoradas por el lobo, los conejos por los coyotes, los gatos saciados eran neutrales y los perros se ahogaron con sus huesos. La serpiente esperaría pacientemente su momento para envenenar a los demás animales y quedarse con todo porque el tiempo estaba de su lado. Así es la política de la humanidad, dijo Tésgo, discuten lo que cada uno anhela, pero el tiempo no está de su lado; incluso la serpiente.

La política humana estaba llena de burocracia; las serpientes dictaron a qué debían prestar atención y los gatos ya saciados tenían pereza de reportar lo que acontecía; por eso las ovejas terminaron comidas por los lobos. A los lobos ni a las serpientes les importó realizar sus deseos sin tomar en cuenta las consecuencias; apartaron la mirada de los problemas reales que involucraban a cada animal del mundo; solo exaltaban lo que era relevante de sus logros porque creían que era la verdad absoluta. Todos los huesos, recipientes y restos de comida que habían producido los botaron hasta que el espacio para descartarlos escaseó y todos los problemas que decidieron pasar por alto tocaron sus puertas al mismo tiempo, sin tener manera alguna de reaccionar:

¿Qué hacemos ahora? Exclamaron todas las serpientes con sus deseos incompletos.

No sabemos. Dijeron todos los animales vestidos de trajes al unísono.

Luego, todos los animales que excluyeron durante años se acercaron a ellos y les dijeron:

Siempre propusimos soluciones, pero nunca fueron más que ideas ignoradas. Siempre hubo alguien que impedía el paso.

Qué hemos hecho!

Decidir que sus deseos egoístas eran la verdad absoluta, excluyendo a todos los demás.

Las democracias se jactaban de ser la mejor forma de gobernar y de representar al pueblo, pero siempre excluyeron a los grupos que tenían ideas distintas en contra de sus intereses y al querer acaparar el poder para ellos, nunca dieron paso a nuevas corrientes de ideas que podrían haber cambiado todo. Los humanos continuaron luchando hermanos contra hermanos, padres contra hijos, pueblo contra pueblo por ideologías, religiones, etnias e identidades. Cada vez que la humanidad avanzaba un paso más lograba hazañas inefables, descubrimientos revolucionarios, tecnologías de ficción, pero se aislaron aún más de los otros humanos que perdieron las conexiones que los unían unos a otros. Fue la época con mayor comunicación y tecnología; sin embargo, separados como nunca.

Todos deseaban resaltar su individualismo, su identidad, su cultura, sus deseos; tanto que la civilización se empezó a caer en pedazos, el daño ya era irreparable, el tiempo y el progreso estaban en su contra. Los humanos al hacer introspección comprendieron que cada paso que debían haber dado debería haber fortalecido su conexión, no romperla.

Capítulo IV

Contragénesis

La humanidad se polarizó en grupos cada uno con ideas tan distintas que eran incomprensibles para los otros, y todos olvidaron qué era la tolerancia. Todos discutieron qué era lo correcto y lo apropiado para todos, cuando cada humano era un universo infinito de potencial y posibilidades; algunos querían imponer sus ideas sobre otros; unos solo intentaban hacer ver la realidad a sus compañeros, hermanos, padres o hijos, pueblo a pueblo. Solo consiguieron el repudio y rechazo de las masas, mientras que las masas apoyaron las causas que creyeron eran las más importantes, las correctas. Los gobiernos trataban de manejar los estados de la mejor forma posible, pero las naciones siempre estaban descontentas; quién hubiera sido tan sabio para decirles que ellos eran los responsables del cambio.

Los gobiernos trataban de llevar a cabo sus ideales y los de su nación: riqueza, territorios, materias primas, hegemonía, supremacía, tecnología… ¿Era eso lo realmente valioso? La vida es una oportunidad única y limitada; ellos nunca entendieron el significado detrás de esas palabras. Nunca comprendieron que los bosques que los protegían de la madre naturaleza eran riqueza; ellos solo querían la madera para construir. Nunca comprendieron que el mar era el pulmón del planeta Tierra, solo lo usaban como fuente de alimento y un basurero; sacaban del suelo sus materias primas, pero la Tierra era su hogar. El vasto cielo límpido junto con su aire lo mancillaron de gases mortales; gases que aumentaban la temperatura del mundo acercándolos lentamente hacia su final; cada vez que la humanidad avanzaba un paso, se aislaba aún más de sus orígenes y de la naturaleza.

Aun cuando se acercaban incesantemente a su final, existía un pequeño margen de revertir su destino; mas los humanos continuaron luchando entre ellos por ideologías, religiones, etnias e identidades. Era todo lo que los definía. En qué seres tan lamentables se habían convertido los humanos. El único animal del globo que decidió luchar entre él mismo, construir maravillas y destruirlas fue el humano. Milenios de progreso basado en la destrucción podrían acabar en cualquier instante; los que estaban advertidos de ello escuchaban el incansable sonido vacío y desalmado del tiempo que arrasaría con todo lo conocido y por conocer; solo se necesitó una serpiente y un botón para acabar con las posibilidades de la humanidad.

Así fue el fin de la humanidad, pero no de la vida. Ella empezó a esparcirse por todo aquel planeta: en cada rincón oscuro, agua congelada o hirviendo, en las grandes montañas o en los profundos océanos; la vida siempre encuentra la manera de abrirse paso por la existencia y el humano no era necesario para la vida.

FIN

Reflexión

Un escrito anónimo rescatado por el sacerdote jesuita Alfredo Ferro y reportado por Mejía (2004) nos ilustra lo opuesto del origen:

Contragénesis

Al final el hombre destruyó su mundo que se llamaba tierra.

La tierra había sido hermosa

Hasta que el espíritu del hombre se movió sobre la faz de ella

Y destruyó todas las cosas.

Y dijo el hombre, que haya tinieblas.

Y al hombre le parecieron buenas las tinieblas,

Y les puso por nombre: Seguridad.

Y decidió así mismo en razas y religiones y clases sociales.

Y no había ningún atardecer y ningún amanecer

En el día siete antes del final.

Y dijo el hombre, que haya un gobierno fuerte

Para reinar sobre nosotros en nuestras tinieblas.

Que haya ejércitos para matarse mutuamente

Con orden y eficiencia en nuestras tinieblas;

… Para destruir a aquellos que nos dicen la verdad,

Aquí y hasta los confines de la tierra,

Porque nos gustan nuestras tinieblas.

Y no había ningún atardecer y ningún amanecer

En el día seis antes del final.

Y dijo el hombre, que haya cohetes y bombas

Para matar más rápido y fácilmente.

Y hubo cámaras de gas y hornos

Para acabar mejor el trabajo.

Y era el día cinco antes del final.

Y dijo el hombre, que haya drogas

Y demás maneras de escapismo

Ya que hay una leve y constante molestia,

La REALIDAD,

Que nos estorba nuestra comodidad.

Y era el día cuarto antes del final.

Y dijo el hombre, que haya decisiones entre las naciones

Para que podamos saber

Quién es el enemigo de nosotros.

Y era el día tres antes del final.

Y de último dijo el hombre,

Hagamos a Dios a nuestra imagen y semejanza

No sea que algún otro Dios nos haga competencia.

Digamos que Dios piensa igual que nosotros pensamos,

Que odie igual como nosotros odiamos,

Y que mata igual como nosotros matamos

Y era el día dos antes del final.

El último día

Hubo un estruendo grande sobre la faz de la tierra.

El fuego purgó el hermoso globo terráqueo,

Y hubo silencio.

Y vio el señor, Dios,

Todo lo que había hecho el hombre.

Y en el silencio

Que envolvía los restos humeantes

Dios lloró.

Tésgo, el ser primigenio

Hoy en día la humanidad vive la cúspide de su desarrollo cultural, tecnológico, social, económico, e incluso la época más pacífica de la historia aun cuando hay más humanos vivos al mismo tiempo que nunca en la historia. Las inteligencias artificiales, la transferencia de datos a alta velocidad, la hiperconectividad, la globalización, los servicios, el entretenimiento, el transporte, el conocimiento, la agricultura y prácticamente cada ámbito de la sociedad maximizado a su mayor rendimiento y potencial posible con la tecnología actual. La ciencia brinda aportes constantes, se crean arte y cultura, se mejora la calidad de vida de las personas, pero, aun así, somos la generación que mayores problemáticas debe afrontar a futuro. Pobreza, concentración de riqueza, manifestaciones sociales, corrupción, daño medioambiental, migraciones masivas, refugiados, tráfico de drogas, amenaza de invierno nuclear, desastres naturales, cambio climático, escasez de energía, crímenes y una larga lista continúa.

Ahora bien, la sociedad afronta estas y más problemáticas que se arrastran desde el siglo XX y deben ser solucionadas por los jóvenes, por los nuevos adultos que toman el mundo en sus manos, ya que deben desafiar el statu quo hasta hoy en día han impuesto las élites. Confrontar el poder no es un camino fácil; se deberán llevar a cabo muchas luchas para lograr el cometido. Por ejemplo, no hay un camino fácil para vencer el cambio climático o la contaminación; para evitar la contaminación se debe sustituir el consumo de energías no renovables, como el petróleo, por energías renovables, como la eólica o electrificar la mayor parte de los sectores productivos posible. Sin embargo, cuanta mayor electrificación sea implementada, más energía se necesitará producir para abastecer los sectores productivos cayendo así en un círculo vicioso, por lo que el cambio depende de nuevas mentes con soluciones nuevas.

POEMAS (de J.M. Quesada Matarrita)

De improviso 06/02/22

Fue efímero el cruce de miradas.

Algo sin previo aviso que llegó hasta la honda soledad de mi vacío.

Cómo por obra del destino nos reencontramos.

Saltaste a lo desconocido aun viendo su oscuridad.

Como soldado en guerra que tiembla por miedo de heridas.

Pajarillo que se alza en vuelo inexperto.

El sonido de distancia, es el que me apacigua.

Y un mar de posibilidades es lo que nos aguarda.

Abismo eterno 15/05/22

Algo he aprendido de mis errores.

Siempre hay una oportunidad más.

Sabor de felicidad deseé probar.

La bomba de sangre cansada está.

Porque nada es lo que aparenta en realidad, ni el amor.

Aunque será este un nuevo camino.

Pero la ácida amargura ahí está.

Hasta que te hacen pedazos.

Amar, sin reparo te aleja de tu luz.

Luz de paz 15/05/22

Antes todo era muy diferente.

Malas señales creí ver,

Así como cuando descubres un nuevo arte ¿vicio o pasatiempo?

Reto saber qué es en realidad.

Te lo digo yo, dudé como si de un mentiroso se tratase.

Entendí que ese andar de cisne no fue lo único que me atrajo.

Su actuar de cisne va más allá de lo tangible.

Horas bastan para poder comprenderlo.

Amargura de antaño la que con ella desapareció.

Una nueva flor de vida surgió.

No sé qué pasará.

¿Seré su héroe griego o el villano de su relato?

Yo solo soy un testigo de mi propia historia.

Hojas secas 16/08/22

Inevitable es la llegada del otoño, es algo natural.

Ninguna sofocante primavera es eterna como el tiempo.

¿Cuál de las dos será mejor?

Una rebosante vida llena de ilusiones;

Una de metaformosis llena de decepciones.

Las palabras son más ligeras que el viento;

Pero los malos hábitos son como penitencia.

El árbol perenne aún exhala vida por doquier;

Unas cuantas hojas secas no bastarán para matarlo.

Él se aferra desesperadamente a un terreno de grava.

Peligro en el viaje 19/10/22

Nada es lo que parece en realidad,

todos tienen una cara de falsedad.

Desde la gran reina de las elegancias

hasta la mucama con su simplicidad.

¿Qué ha sucedido para acabar así?

No es culpa de los terrenos pastados,

sino del pastor que no supo cuidarlos.

¿Será el interior o el exterior la solución?

Frívolas aventuras en sucesión han

dañado el núcleo de sus pensamientos.

Ahora es incapaz de concebir algo más

que escenarios pesimistas sin reparo.

Ingenuidad efímera 19/10/22

Eso es lo que se es al vivir poco,

Eso es lo que sientes al repetirlo.

Es una sensación de lugubridad,

Es un sentimiento de dulce acidez.

Señal de perdición como mal augurio,

Como mal augurio de tempestad.

Tempestad de enredaderas espinosas,

enredaderas tan largas como el cielo.

Eso es lo que se cree al vivirlo,

Eso es lo que percibes al caer de nuevo.

Es una interpretación de oscuridad,

Es una emoción de malestar perpetuo.

Inesperado 5/6/23

Era una desconocida que solo existía,

Era una compañera que no conocía.

Todo cambió cuando alguien mencionó,

Todo lo que él hacía ella lo compartía.

Son tan opuestos uno del otro,

mas son tan parecidos entre ellos.

Con música ella brilla más que el sol,

Su alegría no se compara con un girasol.

Los pájaros cantan y ella aperece,

Él lo que hace es que agradece.

El futuro es un presente incierto,

Por ello me deja desconcierto.

¿Qué pensará? ¿Qué sucederá?

Las casualidades son locura.

Es la nomenclatura de dulzura,

La ternura de la penumbra.

Son personas que cambian el día,

cambian tu vida con su companía.

Era una desconocida que solo existía,

Era una compañera que no conocía.

Presión 10/06/23

¿Qué será esto que siento cuando la veo?

¿Qué será esto que pienso cuando la escucho?

Ella actúa tan normal como la mañana,

Ella acentúa esa disparidad sin artimaña.

Su lírica interna no solo me atrae a mí,

Su lírica interna es una que embelesa a cualquiera.

Una belleza sin destreza, una maleza con certeza,

Una rudeza sin delicadeza, una riqueza con tristeza.

Aquel futuro incierto cada vez se aclarece más,

Las acciones que presencio se llevan las dudas.

La realidad sigue siendo cruel como siempre,

¿Habrá manera de escapar de este fatídico destino?

En un jardín puede haber miles de rosas,

pero solo una de ellas es mi rosa.

En el mundo hay miles de zorros,

Pero solo he decidido domesticar uno.

El dolor es aún más profundo que antes,

Él creyó y cayó aún más profundo que antes.

Él es uno más del montón para ella,

El sentimiento ella lo desconoce.

Sometimes I feel my actions are effortless,

Nonsense in the end, nor the beggining.

She is not into me, and she’ll never be,

How pity would it be for me.

Masoquismo de ternura día tras día,

Locura de cordura, cultura de dulzura.

¿Qué será esto que siento cuando la veo?

¿Qué será esto que pienso cuando la escucho?

Tu diario vivir (Canción)

Acá vive el condenado a la tragedia,

Alineado a la tristeza y la envidia.

En la ciudad ronda la codicia personal,

Parece que todos tienen un rival.

El terrorismo acecha en cada esquina,

Es la vida de control, sucia y mezquina.

En la noche la indiferencia es visible,

Quien desea limpiar todo lo acusable.

Es una lucha con la operación,

De discriminación y detención.

Tú que sufres los ataques,

Sal a la calle a los combates.

Combates y ataques en todo el país,

Destruyen familias a diestra y siniestra.

Atacan historias sin importar el desenlace,

Enfermedad que no ataca el cuerpo sino la historia.

Todos sufren y nadie descansa,

Sal a la calle para que no te callen.

En la noche la indiferencia es visible,

Quien desea limpiar todo lo acusable.

Es una lucha con la operación,

De discriminación y detención.

Tú que sufres los ataques,

Sal a la calle a los combates.

Durante el día tampoco descansas,

El peligro existe sin importar el momento.

El ataque a las familias y a las historias no termina,

Un miedo de existir en mi propio país.

Salir a la calle significa salir a la muerte,

Sin miedo a existir siempre tal realidad.

Qué nos espera al final del camino,

Ojalá no sea de desdicha y muy repentino.

Debemos empezar a hacer el cambio,

Para que no sea con propósito vacío.

Solo sé una cosa,

La vida es hermosa.


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