SALMO 152
Poema de Michelle Najlis
Fragmentos todos de mi cuerpo,
bendigan al Señor
ensálcenlo con himnos por los siglos.
Altas olas de mi sexo, hondos mares de mi vientre
bendigan al Señor.
Fuego de mi fuego, carne de mi carne
bendigan al Señor.
Manos que acarician el aire, boca que besa el sonido de tu voz
bendigan al Señor.
Leves pies que danzan embriagados de Vida
Ojos que descubren el sol cada mañana
bendigan al Señor.
Oídos que escuchan jubilosos el canto de las aves
bendigan al Señor.
Torre de mi cuello, aroma de mi cálido lecho
Tálamo nupcial, perfume de albastro
bendigan al Señor.
Semillas, hojas, frutas que alimentan mi cuerpo
Flores que coronan mi cabeza
bendigan al Señor
Agua de los ríos que sustentan mi sangre
Viento que rodea mi cintura
bálsamo sagrado que acaricia mis pechos
bendigan al Señor
Alvéolos y bronquios, vientos y tempestades
bendigan al Señor
Bendigan mis neuronas al Señor
alaben mis palabras a la Vida.
Cumbres de mis pechos, bendigan al Señor
ensalzadlo con himnos por los siglos.
Hijos de mi vientre,
bendigan al Señor.
Mujeres de mi pueblo,
bendigan al Señor
Patricia, Ximena, Vidaluz, bendigan al Señor.
ensálcenlo con himnos por los siglos.
Bendito el Señor en la bóveda pura de mi vientre
alabado y glorioso y ensalzado por los siglos.