TDNA

Temas de nuestra américa

e-ISSN: 2215-3896.
(Enero-Junio, 2023). Vol 39(74)
DOI: https://doi.org/10.15359/tdna.39-74.10
Open Acces: https://www.revistas.una.ac.cr/index.php/tdna
e-Mail: temas@una.ac.cr
Licencia: CC BY NC SA 4.0

NUESTRA AMÉRICA EN FEMENINO


Del artista visual Mauricio Cordero, 2022.

¿Cómo pintar el mural de una mujer-agua?

How to paint the mural of a water-woman?

Como pintar o mural de uma mulher-água?

Msc. Mauricio Álvarez-Mora

Académico, Escuela de Geografía

Programa Kioscos Socioambientales

Universidad de Costa Rica

ORCID: https://orcid.org/0009-0002-4786-2372

Recibido: 21/4/2023 - Aceptado: 6/9/2023


Resumen

El presente ensayo expone la obra de Xinia Briceño, una mujer de agua, que nació en una de las zonas más lluviosas de Costa Rica, en el pueblo de Siquirres. Dedicó su vida a luchar contra la contaminación de agua por agroquímicos, resultante del agronegocio de la piña. Fallecida tempranamente, fue un referente en la defensa del derecho comunal al agua potable, la cual se contaminó por el químico bromacil que afectó a más de 2000 personas de la zona. Xinia y su pugna inspiraron a cientos de personas de la juventud universitaria que encontraron en ella una maestra y una gran luchadora por el derecho al agua.

Palabras clave: Xinia, derecho al agua potable, luchas comunales, agronegocio piñero, América Latina.

Abstract

This essay is about the work of Xinia Briceño, a woman of water, who was born in one of the rainiest areas of Costa Rica, in the town of Siquirres. She dedicated her life to fighting against the contamination of water by agrochemicals resulting from the pineapple agribusiness. She died prematurely and was a reference in the defense of the community’s right to drinking water, which was contaminated by the chemical bromacil, affecting more than 2,000 people in the area. Xinia and her struggle inspired hundreds of university students who found in her a teacher and a true champion in the defense for the right to water

Keywords: Xinia Briceño, right to drinking water, community struggles, pineapple agribusiness, Latin America

Resumo:

Este ensaio apresenta o trabalho de Xinia Briceño, uma mulher da água, que nasceu em uma das áreas mais chuvosas da Costa Rica, na cidade de Siquirres. Ela dedicou sua vida à luta contra a poluição da água por agrotóxicos resultante do agronegócio do abacaxi. Ela morreu muito jovem e foi um ponto de referência na defesa do direito da comunidade à água potável, que era contaminada pelo produto químico bromacil, que afetou mais de 2.000 pessoas na região. Xinia e sua luta inspiraram centenas de estudantes universitários que encontraram nela uma professora e uma grande lutadora pelo direito à água.

Palavras-chave: Xinia Briceño, direito à água potável, lutas comunitárias, agronegócio do abacaxi, América Latina.

Xinia Briceño fue una mujer de agua, nació el 29 de abril de 1974, en una de las regiones más lluviosas del país: en el corazón del Caribe, en la comunidad de Milano, a unos 16 kilómetros del centro del cantón de Siquirres.

Falleció el 20 de marzo del 2022. Nos dejó a los 47 años y con la mitad de su vida dedicada a la lucha contra la contaminación del agua con agroquímicos usados en el agronegocio de la piña.

Fue un referente en la defensa del derecho de su comunidad al agua potable. Estuvo, por más de 15 años, a la cabeza del Acueducto Comunal (ASADA) de Milano de Siquirres, desde donde batalló contra la contaminación con agroquímicos, vertidos por las empresas piñeras circundantes.

Desde mediados de la década de los 90, se inicia la siembra de la piña en la zona y, con esto, la alerta de posible contaminación. Ya en 1996, se generó un primer reporte desde el mismo Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (AyA) sobre la posibilidad de contaminación de las fuentes que abastecen a Milano y El Cairo, por las cercanías de las plantaciones de piña, y se emitió una serie de recomendaciones sobre el uso del suelo, que evidentemente nunca se cumplieron.

Sería hasta 2003 cuando el Instituto Regional de Estudios en Sustancias Tóxicas (IRET) de la Universidad Nacional (UNA) realizó estudios y detectó la presencia del herbicida bromacil en el agua que abastecía a más de 2000 personas de la zona de Siquirres. Sin embargo, el poder de la agroindustria, disfrazado de discusiones técnicas entre métodos y acreditaciones de laboratorios, dejó a la gente de estas comunidades tomando agua contaminada hasta el 2007, momento en el que se inició el abastecimiento de agua en cisternas.

Fue recién, en el 2018, que la comunidad siquirreña logró tener una nueva fuente de agua limpia, gracias a la tenacidad de Xinia, quien comandó la ASADA y debió atravesar un gran proceso burocrático para concretar el proyecto. Mientras tanto, durante más de una década, la localidad recibía agua en cisternas para el consumo humano y seguía conectada a las fuentes contaminadas. Es decir, la ciudadanía subsidia el suministro de agua en cisternas, mientras las compañías responsables no han desembolsado un solo dólar hasta hoy, tal como exclamó Xinia en el 2015: “¡Ya nos hubieran construido tres acueductos con lo que han gastado en cisternas!” (Semanario Universidad, 11-3-2015). Así de impune y de limpia es la producción piñera.

Ya han pasado 5 años desde que se inauguró el acueducto y se debería tener el cálculo del costo final del servicio de abastecimiento por cisterna para hacer la demanda a las empresas responsables de la contaminación; pero eso no parece que vaya a pasar. Tampoco se sumarán las atípicas gastritis en menores de edad y otros efectos en la salud de toda la población que consumió agua contaminada por un tiempo indeterminado.

Xinia fue lideresa de esta importante lucha, que visibilizó en muchos lugares del mundo y espacios como la Asamblea Legislativa, la Corte, el AyA y las universidades. Incluso la llevó a dar testimonio en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).

Otra de las facetas que se recordó en los distintos homenajes a Xinia fue la labor docente que desarrolló con cientos de estudiantes nacionales y del extranjero, quienes pasaron por su cátedra y su vida. Fueron distintas generaciones de las universidades, a través de cursos, proyectos, trabajos comunales e investigaciones. El alumnado recuerda cómo la casa, la cocina y hasta las improvisadas tiendas de campaña en el patio se convirtieron en espacios de aprendizaje y enseñanza, donde conocieron otro tipo de docencia, donde el cariño y lo sencillo impacta para siempre.

En un homenaje realizado el 7 de abril pasado, por distintas instancias de la Universidad de Costa Rica (UCR), el estudiante Jefferson Castillo reconoció a Xinia como una maestra, que junto con su familia “Tuvo toda la confianza de decirnos: ‘Entren y sean también parte de mi vida’”. Todo este proceso de Trabajo Comunal Universitario (TCU) lo inspiró y motivó para involucrarse en la organización comunitaria de su localidad. Recuerda que cuando terminó el TCU se dijo:

¿Y yo qué voy a hacer con esto? Yo soy aquí del Caribe también, igual que todas las personas que viven en Milano(...) Xinia me dijo ‘Muchachito, despabílese de verdad, si ella puede y todos pueden, usted también puede’. Yo después de que terminé el TCU empecé a involucrarme con la Asociación de Desarrollo de mi comunidad. Actualmente tengo 3 años de ser parte de la junta directiva, a la fecha soy el secretario. También lidero una pastoral ecológica aquí en la parroquia de mi comunidad, también empeñados con el tema de la conservación del ambiente y definitivamente esa es la huella de semilla de Xinia en mí, del proceso de TCU en mí (Homenaje a Xinia Briceño, 7-4-22).

Además, otra gran docencia de Xinia fue en el nivel comunitario; enseñó e inspiró a muchas otras comunidades en la defensa del agua y la organización colectiva para la protección de la vida. Por eso, no extraña que muchas comunidades, ASADAS, organizaciones e instituciones sintamos tanto la partida de Xinia.

Su vida fue agua, buscarla, conservarla, entregarla, administrarla y resguardarla, inspirada siempre por la alegría y la solidaridad. De su sonrisa y su pelo nació esa otra agua de justicia de la que bebieron las comunidades y el movimiento socioambiental en defensa de los bienes comunes. En su alegría e ilusión, transmitió esperanza y forjó un liderazgo muy honesto y auténtico.

Homenaje en Milano

A finales de mayo de 2022 , desde la ASADA de Milano, el TCU "Dialogando el presente", de la UCR, y también desde el Frente Nacional de Sectores Afectados por la Expansión Piñera (FRENASAPP), se realizó un homenaje con arte y color, haciendo un mural en memoria de Xinia.

El mural en el cual se le rinde homenaje contiene 3 dimensiones importantes, las cuales permiten que el arte tenga sentido en la lucha: la social, la artística y la emocional. El artista visual Mauricio Cordero, de Pococí, quien tuvo la responsabilidad de pintar el mural, nos narró su parte de su experiencia.

Cordero está efectuando un importante proceso artístico de murales con conciencia social en distintas partes del país, pero con más énfasis en la región Caribe. Es un apasionado del dibujo, el diseño y del arte en general. En su trabajo se destaca la creación o intervención de objetos, la ilustración, el diseño gráfico, las esculturas y otras formas de arte visual (ver más del artista: https://blogaviondepapel.wordpress.com).

Lo primero que resalta el artista es el honor que implica hacer este mural-retrato de una persona como Xinia y, aunque no tuvo la oportunidad de conocerla en vida, se dio cuenta de la grandeza de persona que era, cuando escuchó sobre la lucha de la comunidad de Milano. Las historias de las personas promotoras de este mural dejaron claro el papel que tuvo Xinia en este proceso como dirigente comunal, así como el apoyo y el amor que ella recibía por parte de la gente.

Quienes pertenecían a la comunidad recordaban las penurias y los esfuerzos por lograr defender el derecho a tomar agua limpia y construir el acueducto, entre ellos, rifas, bingos, préstamos, venta de comidas, recolección y venta de chatarra, hasta renuncias a las dietas que contempla la ley para la Junta Directiva de la ASADA. Fueron tantos y tan variados los detalles que se recordaron y que las personas querían incluir en este homenaje.

Hasta la fecha, según Cordero, nadie se hubiera imaginado que la muerte de Xinia iba a ser tan repentina, dejando atrás un gran agujero, no solo en sus amistades y familia, sino también en su comunidad, porque, finalmente, se convirtió en una persona reconocida y notable, por la razón de haberles devuelto el derecho al agua que todas las personas tienen.

En la parte conceptual del mural, el artista reflexiona sobre los elementos que debería contener esa obra y los símbolos que es preciso tomar en cuenta. Quedó claro que, a pesar de haber diferentes visiones por parte de las personas, todas coincidían en que Xinia fue una gran defensora del derecho al agua, a tal punto que decían que ella debería estar representada dentro o saliendo del agua; pero siempre rodeada de agua y con características que la hicieran ver como una defensora de este bien colectivo. Resaltaron otros elementos sobre ella, como que no se dejaba engañar o manipular en las decisiones y los procesos políticos que lideraba. Era cariñosa y atenta; también fuerte, presente en sus decisiones, cualidades indispensables para liderar la lucha histórica por la defensa del agua.

Otro componente retomado en el mural fue el pelo de Xinia, la gran cabellera que tenía, sobre todo cuando se lo soltaba. Una caballera de colochos muy abundante; y su risa. Definitivamente, era una persona muy alegre, rasgo proveniente de las importantes victorias y los precedentes que produjo la lucha; no obstante, también tanto de la familia como de amistades increíbles que la acompañaban y la apoyaban en todo.

Los primeros elementos para los bocetos vinculan a Xinia con el agua, su cabellera abundante y su risa. Luego se fueron agregando otros, como la naturaleza de la zona.

Desde una dimensión más social —continúa reflexionando el artista—, es muy revelador conocer a una persona como Xinia, mediante los relatos, y entender su importancia en las luchas sociales. Este es uno de los puntos más fuertes que, como artista, no podía dejar de lado. En ningún momento se puede perder la perspectiva de que lo ahí expresado en el mural es la memoria de Xinia; esto permite reflexionar de la capacidad que tiene el arte para transformar e incidir en el nivel social. Al inicio del proceso de la intervención artística, cuando las personas empezaron a ver lo que estaba apareciendo, se fueron acercando poco a poco para recordar la relevancia y la magnitud de las acciones de Xinia en vida. Recordarla a ella posibilita que siga activa y unida a la lucha de Milano, del Caribe, del país y del mundo.

Desde una parte más emocional, Mauricio Cordero se abre y nos cuenta que, al estar recibiendo constantemente fotos de Xinia, que evidenciaban su compromiso en la lucha por la defensa del agua, y al tratar de ir tanto memorizando como recordando las facciones y rasgos, “Se me apareció en un sueño la imagen de ella”. Apareció con la piel azul, tonalidad que se está usando en el mural. Ese color de piel azul en el mural nace con este sueño. Otras personas igual comentaron que Xinia las ha visitado en sueños, con mensajes de optimismo para que no dejen el trabajo que se está haciendo. Recordaban que el dolor, el cual estaban sintiendo en ese momento por la pérdida de Xinia, era pasajero y que lo más importante, como lo era para Xinia, es la lucha del agua y frenar la expansión piñera incontrolada.

En una etapa más avanzada del trabajo, fue muy reveladora la forma en que las personas se acercaban y recordaban a Xinia frente al mural, en una mezcla mágica entre orgullo y lágrimas. La muerte de Xinia es una experiencia reciente y latente; sin embargo, solo refleja su calidad humana y lo difícil que será llenar ese vacío. Aun así, de alguna manera, nos deja muchas motivaciones, preguntas y ganas de entender la importancia de defender las comunidades, de resguardar la naturaleza que tenemos, sobre todo, de entender y conocer la lucha de Milano, en la cual Xinia va a ser una parte importante; más, en esa línea del tiempo en la que logró establecer un precedente trascendental para la defensa comunitaria del agua, frente a los voraces agronegocios de la piña.

Me enamoré del agua, me enamoré de la naturaleza

En el 2014, la profesora de la UCR Liliana Monge entrevistó a Xinia Briseño, en el marco de su tesis sobre ambientalismo y subjetividad política. El estudio reconstruyó diferentes trayectorias de activistas, con el propósito de indagar la dimensión formativa de la lucha socioambiental en Costa Rica.[1] A continuación, algunos extractos de esa entrevista:

Sobre su motivación principal, Xinia aseguró:

Empiezo a participar, así como más cerca del momento de que vi la gran afectación en ciertos animales y en la salud de las personas.

No me imagino dándome cuenta de algo como lo que estaba viviendo y no iba a tomar parte. Porque yo siempre… Siempre, de naturaleza muy mía, siempre he sido de defender al que menos puede o al que no habla, eso sí lo he tenido desde muy pequeña.

De los referentes personales señala que:

La persona que influyó en mí fue Carlos Arguedas. La lucha, la forma en la que él se expresaba en ayudar a los demás, fue muy fuerte. Él inclusive terminó muriendo de cáncer por los químicos utilizados en las bananeras. Entonces cuando usted tiene toda esa vivencia es muchísimo más fuerte. Nosotros hicimos un cierre de calle en el 2009. Cuando se hizo ese cierre de calle conocí a Don Carlos.

También señaló que la marcó “la capacidad que ha tenido Doña Erlinda Quesada, que ha tenido la capacidad de participar como regidora”. De hecho, cuando se le preguntó sobre su perspectiva futura:

Yo pretendo y espero algún día poder estar en alguno de esos puestos. No digamos que voy a ser diputada, porque tal vez eso no sería lo ideal, sino seguir participando a nivel comunitario y seguir tratando de aquí en la municipalidad —ya yo puedo meter mano de lo que es el cuidado de la región ambiental— ya yo puedo participar, tengo voz.

En relación con el conflicto vivido por la contaminación de las fuentes de agua, aseguró:

Entonces ya empecé a ver que no era solo ser el presidente de la ASADA, sino era ver a quién o cómo hacíamos para que esto cambiara, para que en algún momento esta empresa o la empresa que haya contaminado el agua tenga que pagar (…)

Si este país fuera totalmente ecológico, con ese discurso sería ideal que se preguntaran qué está pasando con las plantaciones piñeras, qué está pasando con las fuentes de agua, quiénes están faltando al agua, y eso se da en muchas… muchas ocasiones.

En el tema de sus valores y saberes Xinia reflexiona:

Yo me he capacitado en cosas que tienen que ver con el acueducto, o sea me enamoré del agua, me enamoré de la naturaleza. Eso aprendí a enamorarme de lo que nos rodea, que debe realmente cuidar lo que nos rodea…

Si usted no conoce de dónde viene su fuente de agua, no conoce nada porque esta es la parte primordial de su vida y muchos ni nos preocupamos por eso…

Pero en esos monocultivos, es tal la cantidad de árboles que talan, secan las fuentes de agua, drenan porque la piña no necesita agua, provocan el calentamiento global y por ende el daño para nosotros.

Epílogo

La compañera Xinia será agua que calme la sed de justicia de muchas comunidades y futuras generaciones. Su lucha es un ejemplo y prevalece su legado en agua limpia para las comunidades. Predominará en el nuevo acueducto en Milano, en la prohibición al bromacil, uno de los agroquímicos que más salió y sigue saliendo en las muestras de agua, aunque, en teoría, ya no se aplique.

Xinia se mantendrá viva en la organización de las comunidades frente a los estragos de la expansión del monocultivo de la piña y la lucha de las mujeres ante los agronegocios expansivos. Se preservará en la salud de la niñez de Milano que ya no sufrirá gastritis y otras enfermedades por la contaminación del agua. Además, estará en su nieta, sus hijas y su familia, quienes tienen su legado y ejemplo.

Su sonrisa y su espíritu de lucha serán humedad en los desiertos de piña; su alegría será compañera de muchas otras causas urgentes por la salud del planeta. Hasta la vida y el agua siempre, Xinia Briceño presente.

Referencias

[1] Monge, L. (2014). Tesis para optar por el grado de Magíster en Ciencias Sociales. FLACSO, Argentina.

ambientales EUNA UNA

Instituto de Estudios Latinoamericanos (IDELA)
Universidad Nacional, Campus Omar Dengo
Apartado postal: 86-3000. Heredia, Costa Rica
Teléfono: +506 2562-4056
Correo electrónico temas@una.ac.cr